"No hay excusas". Con esa frase contundente Andrés Yllana, entrenador del modelo 2023 de San Martín, marcó el camino para el esperado debut esta jornada por la Primera Nacional. Será en la Costa Atlántica, en el mítico escenario denominado José María Minella y ante un poderoso como Alvarado. A partir de las 20.45 horas (por TyC Sports Play), el Verdinegro pone primera buscando quedarse con alguno de los dos ascensos en juego para la máxima categoría.

Con 18 refuerzos durante su híper activo mercado de pases, el club del Pueblo Viejo encaró una reconstrucción del plantel muy importante. De ahí, será clave la adaptación que tengan las nuevas piezas a la idea que pretende el también nuevo entrenador, Andrés Yllana. Con su inicial 3-5-2 busca contar con un equipo dinámico y corto, tal cual expresó en diálogo con DIARIO DE CUYO en la previa al bautismo en la segunda categoría del país y por la Zona A.

Será una campaña larga como la pasada, que en el caso de San Martín lo tendrá en una primera fase con 34 partidos. El ganador de cada zona tendrá la chance de ir por el primer ascenso a la elite nacional en un mano a mano en estadio neutral. El segundo que suba a Primera se definirá mediante el reducido, al que clasificarán del 2do al 8vo de cada zona. Habrá tres descensos: los últimos de cada zona, y los penúltimos definirán el tercero cara a cara.

¿Cuál es el objetivo de este San Martín? Yllana se focalizó en que "lo más importante para mí, es que la gente sepa a qué juega mi San Martín. Con ese objetivo arrancamos el camino que seguramente no será nada sencillo". En ese aspecto, un armado de plantel casi de cero no es un dato menor, más bien todo lo contrario.

Del otro lado de la cancha estará Alvarado, un grande del interior que pretende crecer y dar pelea. Se armó parecido al Verdinegro con 17 incorporaciones y la apuesta a un técnico como César Vigevani que tendrá su debut en la categoría.

INCIDENTES Y SUSPENSIÓN

Trompadas y dos heridos

Poco. Se disputó del amistoso entre Quilmes y Chacarita.

Los futbolistas de Quilmes y Chacarita, ambos en la Primera Nacional, se pelearon a trompadas ayer en un amistoso jugado en zona Sur y como consecuencia terminaron heridos Gabriel Díaz en el local y Luciano Perdomo en la visita.

"El partido entre Quilmes y Chacarita fue suspendido debido a una discusión generalizada entre los equipos", anunció Quilmes en su cuenta de Twitter.

"Son cosas que pasan, lamentablemente no pudimos seguir jugando. No estamos contentos con lo que pasó y somos todos responsables y debemos hacernos cargo porque son cosas que no tienen que pasar pero sirve siempre para aprender", dijo Aníbal Biggeri, DT de Chacarita, en el sitio 'Doble Amarilla'.

La pelea que terminó con violencia física entre ambas delegaciones, comenzó tras un fuerte cruce de Nicolás Caro (Chacarita) sobre Federico Anselmo (Quilmes). Esto derivó en una recriminación enérgica por parte del delantero, que el defensor respondió con insultos y derivó en una pelea mano a mano que finalizó con un altercado generalizado.

Las imágenes difundidas en las redes sociales mostraron momentos de tensión en el que los futbolistas de Chacarita, con pecheras amarillas, se trenzaron con los de Quilmes, de vestimenta azul, aunque la duración tuvo un total de cinco minutos.

Los dos equipos se armaron con aspiraciones de pelear arriba, para ponerle fin con varias temporadas en el ascenso argentino. Habrá que ver si lo consiguen.