El cansancio luego de una agotadora serie Final ante Bolívar y una larga noche de festejos todavía marca sus secuelas. El histórico Pentacampeonato de UPCN San Juan Voley en la Liga A1 rebalsa de gloria a la institución y cinco de sus protagonistas se reunieron con DIARIO DE CUYO para repasar otra noche inolvidable para un repaso. El presidente, José ‘Pepe’ Villa, el entrenador, Fabián Armoa, el manager, Enrique Valle, y dos referentes del plantel, Demián González y Javier Filardi. Y por ahí comenzó la charla: “Salió ideal la celebración porque no estaba planificada. Media hora después de ganar llamamos para cenar y terminamos siendo unas setenta personas”, afirmó Valle. ¿Quiénes fueron los últimos en irse? “Filardi y Molina se van cuando ven la fregona”, lanzó un sonriente Armoa. “Pepe estuvo con el grupo más ruidoso”, completó Valle.

Las anécdotas fueron una constante en cada tema. Es que salvo Filardi, los otros cuatro protagonistas estuvieron durante todo el lustro dorado en el equipo sanjuanino. Villa reconoció que vivió “sedado durante todos los partidos. Anoche (por el jueves) me emocioné tanto por el título como en el momento que salió el equipo a la cancha. El recibimiento que tuvo de la gente es inolvidable”. Armoa mostró que tanto tiempo juntos hizo que “hablemos un mismo idioma. Se armó un código interno, que el que está afuera no nos entiende. En los técnicos de cada partido, yo no estoy con la tablita. Alguien escucha que digo ‘Demian armá la jugada’ y puede pensar ‘pero este tipo no dice nada’. Pero nosotros nos comunicamos. Es que ya vivimos las cosas de la misma manera”.

González todavía no puede creer haber protagonizado todo lo vivido. “Cuando Quique (Valle) me llamó y me dijo que estaba Fabián acepté porque sabía que era un proyecto serio, con aspiraciones a estar peleando arriba. Pero ganar 5 títulos de Liga, 2 Sudamericanos, ir a 2 Mundiales de clubes, subirse al podio en el último. Ni siquiera lo imaginaba”. Junto a Filardi, son los dos jugadores más ganadores y Armoa es el entrenador con más títulos. Pero un nuevo año de rosas también tuvo su camino espinoso. En la primera mitad de la temporada, UPCN perdió tres partidos con Bolívar (incluida la final de la Copa ACLAV) y un par de caídas ante otros equipos.

Filardi afirmó que haber pasado por esa situación le dio un valor extra al disfrute de su sexto título. “Cuando el equipo no tenía buen rendimiento no mirábamos afuera, sólo para adentro. Fueron muchos días de tomar un café juntos y así se fue armando el grupo. Lo que más valoro fue la reacción porque parecía que cualquiera nos podía ganar y entre todos lo dimos vuelta”. Para González “hubo un click cuando ganamos la copa Master. Fue una dosis de confianza y a eso hay que sumarle que llegó Marcus Popp, que se sumó rápido al grupo y fuimos consiguiendo todas esas cosas. En el Sudamericano vencimos a los dos mejores equipos de la superliga brasileña”. Armoa señalo en ese momento a Nicolás Lazo. “Nico estuvo muy bien. Tiene 18 años y se hizo importante y querido. Fue aire fresco”.



Para Villa el funcionamiento que se mantiene prácticamente en lo ideal desde hace cinco años es que cada uno asume sus funciones. “Al plantel lo definen Fabián y Quique. Cuando criticaba porque habíamos dejado ir a uno, resulta que era mejor al que trajeron, Me taparon la boca. Mi función es apoyar las decisiones difíciles, a veces con todo el dolor del alma. Pero son ellos los que están permanentemente en el plantel”.

Y remató, como si fuera jugador de vóley: “Después de esto nada es imposible. Nadie quería que esto pasara. A nivel nacional, ni en lo organizativo, deportivo y periodístico. Y ante todo eso fuimos capaces”.