La dirigencia de la Asociación del Fútbol Argentino (AFA), con el presidente sanjuanino Claudio Tapia a la cabeza, evalúa la posibilidad de modificar el formato de la actual Liga Profesional, a seis fechas del final, y eliminaría los dos descensos que están estipulados en la máxima categoría del país. El objetivo es contar con un campeonato de 30 equipos para el año que viene.

Hoy a las 10, en la sede ubicada en la calle Viamonte, habrá una reunión informativa con algunos representantes de clubes tal como había ocurrido con otros hace dos semanas. La asamblea se realizaría el 27 de octubre, ya sea para ratificar lo establecido o aprobar los cambios en el reglamento.

Lo llamativo de las variantes es que serían en un certamen próximo a finalizar y hasta podría afectar el desarrollo de otras competencias. Es el caso de Patronato, que está en zona de descenso y preservó titulares en el duelo de ayer con River por Copa Argentina para priorizar la lucha por la permanencia.

Las tres opciones que maneja la dirigencia son:

A) Eliminar los dos descensos y, a raíz de los dos ascensos de la Primera Nacional, armar un campeonato de 30 equipo (en dos zonas de 15) para el año que viene.

B) En lugar de eliminar los dos descensos, hacer que se jueguen dos promociones frente a rivales de la Primera Nacional y armar un campeonato de 30 equipos (en dos zonas de 15) para el año que viene.

Boca, River y Racing ya manifestaron estar en contra de los cambios que propone la AFA.

C) Mantener los dos descensos, tal como está estipulado, y armar un campeonato de 28 equipos (en dos zonas de 14) para el año que viene.

En tanto, el formato para el 2023 tendría en su primera parte una Copa LPF con el formato de los últimos años: dos zonas (de 15 en este caso) con un interzonal para disputar los clásicos y clasificación de los primeros cuatro de cada grupo a cuartos de final.

Así las cosas, serían 15 partidos más tres fechas más de cuartos, semis y final para aquellos que accedan a la definición por el título.

La gran novedad estaría en el segundo certamen, donde volvería a jugarse un torneo de todos contra todos pero sólo con 20 equipos: serían los 10 mejores de cada zona del primer torneo del año para jugar por el título de campeón de primera división (más la clasificación a las copas), mientras que los diez equipos restantes (últimos cinco de cada zona) jugarían con los mejores 10 de la Primera Nacional (que debería resolver un formato similar al de la Copa LPF para la primera parte) en un certamen que tendría como premio un cupo a la Sudamericana 2024 y además determinaría, de alguna manera, los ascensos y descensos: los primeros diez de esa tabla final se quedarían en Primera para el año siguiente, y los últimos diez arrancarían en la Primera Nacional. Una vez más, claro está, todo está por definirse...