Después de que el sábado se viralizara un violento episodio durante un partido de Cuarta División entre Saenz Peña y Calafate, que derivó en la suspensión del encuentro y la clausura del Club Deportivo Caucete (CDC), desde la institución emitieron un descargo público en sus redes sociales.
A través de un extenso comunicado, el club negó que haya existido una golpiza al árbitro, tal como lo indicaron testigos y fuentes policiales. “Lo de la ‘golpiza’, como dice alguien, no tuvo lugar”, expresaron. Además, cuestionaron el tratamiento del hecho en algunos medios y hablaron de “noticias falsas” que “intoxican las cabezas de los lectores”.
Desde el CDC señalaron que el predio no era sede de un partido propio, sino que había sido alquilado para la disputa de un encuentro correspondiente a la Primera B de la Liga Caucetera-Sanmartiniana, en el que se enfrentaban los clubes Saenz Peña y Calafate.
Sobre la decisión de la jueza de Paz Luciana Salvá de clausurar el club, desde la dirigencia afirmaron que fue una medida “determinante” tomada en cuestión de minutos y que, en su opinión, no estuvo justificada. En su relato, indicaron que había público en el lugar —incluidas mujeres y niños— y que contaban con siete adicionales policiales para garantizar la seguridad.
Respecto al árbitro del partido, a quien en el parte oficial se identificó como la víctima de una agresión por parte del DT de Calafate, el club puso en duda su desempeño. También cuestionaron que el juez haya dirigido otro partido ese mismo fin de semana, sugiriendo una supuesta irregularidad.
Por último, el comunicado cierra con una definición institucional: “Nuestra política siempre será no a la violencia, sí a la verdad y sí a luchar por el deporte más popular del planeta. Que una manzana no pudra el cajón”.
Hasta el momento, desde la Liga Caucetera-Sanmartiniana no se han emitido sanciones disciplinarias oficiales.

