El tribunal que el 4 de octubre pasado condenó a 4 años de cárcel la esteticista Lilian Patricia Coria (60) por facilitar los medios para que una de sus empleadas en "Eros For Men" se prostituyera y así lucrar con esa actividad de la joven, mandó ayer a que la mujer sea detenida y vaya a cumplir su castigo en la cárcel de Chimbas. Eso ocurrió a las 15, pero Coria denunció estar descompuesta, por lo que el operativo que la trasladó al Penal ocurrió finalmente cerca de las 18. El tribunal también ordenó que una junta de médicos, psiquiatras y psicólogos determinara cuál es su estado de salud físico y psíquico, pues su defensor, Nicolás Fiorentino, había presentado un certificado sobre una supuesta grave enfermedad: "cardiopatía congénita de órgano blanco", para la cual un médico recomendó "reposo absoluto". Ayer también dijo que su clienta presenta "un trastorno depresivo mayor con sintomatología ansiosa" y que tiene otro certificado que lo acredita.

El defensor Nicolás Fiorentino (izquierda) insistió en tratar de evitar el encierro de Coria. Los fiscales Juan Manuel Gálvez y Roberto Ginsberg (derecha), ejecutaron en el acto la decisión del tribunal.

 

La decisión de los jueces Alberto Caballero, Verónica Chicón y Gema Guerrero representó un rechazo al pedido de Fiorentino, para que el propio tribunal revoque su decisión de ordenar la detención de Coria el pasado viernes a pedido del fiscal Juan Manuel Gálvez, porque eso vulnera su principio de inocencia, ya que el fallo no está firme y aún le queda una última salida: presentar un recurso de queja ante la Corte Suprema de Justicia de la Nación. Ayer, Fiorentino dijo que detenerla "era atentar contra su vida" y que la decisión "era persecutoria". Coria no asistió a la audiencia por la recomendación del médico que le extendió el certificado. Y su defensor anticipó que presentará la queja ante la Corte de Justicia de la Nación.

Hubo un abrazo entre el fiscal del caso, Gálvez, y el fiscal coordinador de la UFI CAVIG, Roberto Ginsberg, que en el acto pidieron ejecutar la orden del tribunal. Antes, habían manifestado abiertamente su disconformidad, porque entendían que no habían sido "emplazados" a responder el recurso de revocatoria que presentó la Defensa, porque no les constaba de ninguna manera que Coria estuviera enferma o se hubiera fugado o incluso que ya no tuviera por defensor a Fiorentino. Porque la decisión de la Corte de Justicia de cerrar casi todas las vías de reclamo a la Defensa implicaba entender que se estaba ante una persona condenada ("el principio de inocencia está quebrado", dijo Gálvez). Y porque la sentencia debía ejecutarse, ya que el recurso de queja no tiene un "efecto suspensivo" del proceso.

"Es lo correcto, tiene que pagar por lo que hizo. Mi hermana sufre ansiedad y hasta acné le salió por todo esto", dijo la hermana de la víctima, acompañada de su madre, que no ocultó las lágrimas.

Ataques de la familia a la prensa.

 

> CASO RESONANTE

Coria y una de sus hijas habían quedado en la mira de la investigación de la UFI CAVIG en mayo del año pasado, cuando una empleada en su casa de masajes y estética, "Eros For Men", denunció que había sido inducida a prostituirse a cambio de un porcentaje por el tipo de servicios sexuales que prestó, entre el 23 de febrero y el 6 de mayo de 2022.

En su defensa, la comerciante dijo que la denuncia era una estrategia de esa joven de 19 años para zafar de un hecho grave, el robo de plata a uno de sus clientes.

Sin embargo, esa situación no se acreditó en el juicio. Para la Fiscalía y el tribunal, en cambio, sí quedó probado que la joven estaba en un estado vulnerable y Coria se aprovechó de eso para hacer plata prostituyéndola en el local de la calle 25 de Mayo al Este de Mendoza, en Capital.