Contenta. Rocío disfrutando de sus días en Chile.

"Mami, me voy a volver a San Juan porque tengo que estudiar". La que avisaba era Rocío Mercado, de 20 años y estudiante de Bioquímica en la Universidad Católica de Cuyo. Junto a su madre disfrutaban de unas lindas vacaciones en Chile, pero después de 20 días de relax, la facultad apuró el regreso y el pasado miércoles se pegó la vuelta en colectivo.

Allá se quedó su madre, Aída Quinteros, sola, sin su compañía. Y sin imaginar jamás que cuando la volvería a ver sería en un hospital, con su hija llena de cables, sondas y medicamentos, en grave estado y con un futuro incierto.

La otra cara: su madre ayer llorando en el Hospital Rawson.


Rocío fue una de las sobrevivientes del trágico choque en Chimbas que este domingo se cobró la vida de tres personas (ver nota al pie). Otros 6 (incluyéndola) resultaron heridos, con la diferencia de que la mayoría sufrió lesiones leves e incluso muchos ya recibieron el alta médica. La suerte de ella fue distinta y ayer la seguía peleando en una cama de la Terapia Intensiva del Hospital Rawson. Además de golpes en todo el cuerpo, tiene costillas fisuradas, una lesión en una de sus glándulas mamarias y un pulmón perforado.

"Uno nunca imagina que puede llegar a pasar algo así. Se salva del terremoto allá y se viene acá y pasa esto...", dijo ayer Aída, quien se tuvo que venir de urgencia de Chile cuando le avisaron del accidente.

Rocío es la menor de cinco hermanos y vive en el barrio 12 de Diciembre, en Rawson. Ayer pudo despertar, pero siente mucho dolor y su familia prefiere ser cauta. "Los médicos nos dijeron que ha evolucionado, pero puede estar bien y más tarde no se sabe. Por el momento podemos decir que va bien, pero hay que esperar", apuntó ayer Damián, uno de sus hermanos. Y agregó que la chica no recuerda muy bien lo que le ha pasado y les pregunta, pero "preferimos cambiarle de tema, no le queremos decir".

La chica viajaba en una Peugeot Partner, que era conducida por Carlos Falcón (27), según fuentes policiales. Sus familiares admitieron que no conocen a ese hombre. "Es fiestera, le gusta salir mucho, joder. Pero siempre ha sido estudiosa, a los permisos se los ganaba estudiando", dijo su madre. Supuestamente volvían de Barranco, un boliche de la zona de Marquesado, en Rivadavia, cuando en el camino protagonizaron un violento impacto contra un Fiat Duna.

Ahora sólo resta esperar. Mientras, piden cadenas de oración.


Identificaron a la tercera víctima fatal del choque

Viviana Espejo tenía 32 años y era madre.
Sebastián Fernández trabajaba en la construcción junto a su padre.


La Policía finalmente ayer pudo identificar a la tercera víctima fatal de la tragedia vial en Chimbas: la rawsina Patricia Brizuela (43). Su nombre era una incógnita porque no llevaba documentación al momento del siniestro, pero ayer la reconocieron sus familiares, dijeron fuentes policiales.

La mujer se sumó a las muertes de Sebastián Fernández (21) y Viviana Espejo (32). Los tres iban en el Fiat Duna junto a Carlos Porra (37) y Sheila Luna (27), quienes sobrevivieron.

Todo ocurrió a eso de las 7 del domingo, en la Costanera, entre Salta y Centenario, en Chimbas. El Duna impactó de costado con una Peugeot Partner y los dos vehículos terminaron volcando. En el utilitario, además de Rocío Mercado, iban el conductor Carlos Falcón (27), María Sol Fracapani (22) y Alexis Saavedra (26). Todos ellos pudieron salir con vida.

Los investigadores suponen que en la causa del choque tuvieron que ver los montículos de tierra que en ese sector hay a ambos costados de la calzada y que achican la calle, provenientes de los trabajos que se realizan en el predio donde será la FNS 2019. Al parecer ninguno frenó y todo terminó con tres desgracias. Hasta ayer no había trascendido el resultado de alcoholemia.