El fiscal Adrián Riveros imputó ayer un homicidio triplemente agravado a uno de los implicados en el ataque a golpes (se supone que hasta con una piedra y un ladrillo) contra un joven que, 13 días después, murió en un hospital. Participación principal en homicidio agravado por alevosía (atacar a alguien indefenso), por ensañamiento (por hacer sufrir a la víctima) y por la intervención de dos o más personas, fue el delito atribuido a Gonzalo Martín Núñez. Otro de los detenidos de apellido Maldonado, fue excarcelado por la juez de garantías Celia Maldonado, sospechado de encubrimiento agravado, pues se supone que alojó en su casa al también sospechoso Matías David Iñón Carrizo, quien cayó el lunes y tendrá la misma imputación que Núñez. En su defensa, Núñez, dijo ayer que aquel 27 de marzo en la madrugada, en la Villa Huarpe, en Pocito, el ahora fallecido Mario Gastón Lima Ortega y su amigo Luis Maximiliano Quiroga les buscaron pelea y solo se defendieron de ese ataque, en el que intentó minimizar su participación. En la audiencia, Fiscalía pidió 1 año de prisión preventiva para Núñez y 20 días para Maldonado, pero la jueza aplicó 7 meses para Nuñez y dejó libre a Maldonado. Eso sí, le concedió 2 años para investigar.

El hecho que acabó en crimen por ahora es confuso, aunque Fiscalía parece dar crédito a la versión del amigo de la víctima. Dijo que esa madrugada salían de la casa de su hermana en Villa Huarpe, cuando alguien golpeó con una piedra a su amigo para robarle su moto, que no arrancaba. Que huyeron en su moto, perseguidos por al menos cinco sujetos (hay tres prófugos), que les efectuaron disparos hasta que cayeron y él pudo huir. Lima no y eso le costó la vida.