Una nena de un año y medio murió en la noche del pasado jueves luego de que su abuelo la atropellara por accidente cuando hacía marcha atrás con su camioneta en el garaje de su casa. El propio abuelo cargó a la pequeña y la llevó al hospital, pero allí nada pudieron hacer para salvarla. Ese hombre, Antonio De Mula (43, oriundo de Salta), no fue detenido y tuvo que ser medicado por el tremendo shock emocional que sufrió.

Luciana era su única nieta y él la llevaba todas las mañas. Eran inseparables, según la familia.

La terrible desgracia ocurrió a eso de las 23.30, en el fondo de una casa en Lautaro al 200 Este, entre Tucumán y General Acha, en Concepción, Capital. Según el relato de la familia, habían terminado de cenar y De Mula fue hasta el garaje a sacar su camioneta Chevrolet Silverado, sin darse cuenta de que Luciana, la primera nieta que le dio la mayor de sus cuatro hijos. Al parecer, la beba se puso detrás del vehículo, su abuelo no la vio cuando hacía marcha atrás y la embistió. Lo que siguió fue pura desesperación. El propio De Mula cargó en la misma camioneta a la nena y junto a su esposa y la mamá de la pequeña, Florencia, partieron rumbo al Hospital Rawson. Era tanta la desesperación que en el camino chocaron contra el cordón de calle Juan Jufré, dijeron las fuentes. Pero ni el poco tiempo que tardaron en llegar al nosocomio fueron suficientes para salvar la vida de la criatura, pues los médicos no pudieron hacer nada y murió a los pocos minutos a causa de las graves lesiones que sufrió en el impacto.

Ayer en la casa de los De Mula todo era dolor. La familia no encontraba resignación a tan lamentable desenlace. Y uno de los más destruidos por esa dolorosa pérdida era el abuelo Antonio, según una sobrina, quien dijo que estaba "totalmente quebrado" y tuvo que ser medicado por su estado de shock. Por decisión de la jueza Carolina Parra, el hombre no fue detenido (está acusado de homicidio culposo, delito excarcelable), dijeron fuentes judiciales.