Los abogados Fernando Castro y Federico Petrignani, insistieron hoy en que su cliente, el otorrinolaringólogo, Maximiliano Babsía, debe ser absuelto de haber cometido el delito de homicidio culposo de una de sus pacientes, Julieta Viñales Aboal (18), porque la hemorragia letal que sufrió la jovencita ‘ocurrió fuera del ámbito de incumbencia de Babsía. Él había dejado de ser garante y esa posición la tenía el Estado’, dijo Castro.
La posición de los defensores, como era de esperar, fue diametralmente opuesta al planteo de los acusadores. La fiscal, Claudia Yanina Galante, ya pidió 3 años de condena (sin detención) y 10 años de inhabilitación para el ejercicio de la medicina, y María Cristina Naveda solicitó que sí vaya preso por 5 años y, también el máximo de inhabilitación.
Mañana a las 10, el juez Ricardo Moine, dará a conocer su veredicto.
Julieta Viñales padecía un problema de amígdalas que la llevaron a consultar a Babsía el 19 de diciembre de 2019. Entonces el profesional evaluó que era necesario operarla, pero la intervención quirúrgica se produjo recién al volver de vacaciones. El 10 de febrero de 2020 le extrajo la amigdala derecha y cauterizó arterias de la amigdala izquierda.
Luego, la joven sufrió episodios con vómitos de sangre a causa de una hemorragia interna, la más intensa de las cuales sucedió el 16 de febrero de aquel año. Tal fue la gravedad de las secuelas que sufrió por la gran pérdida de sangre, que sufrió muerte cerebral y días después, el 3 de marzo, perdió la vida.
Para los acusadores, en el juicio se probó que en la cirugía, Babsía lesionó la arteria carótida derecha y que con su accionar ‘negligente’ impidió que la joven fuese abordada y salvada por otros profesionales, porque eran evidentes los signos de que algo no estaba bien.
‘Hay prueba de sobra para condenarlo’, dijo la madre de la víctima, Cyntia Aboall, que sigue cada instancia del juicio acompañada de su marido, Leonardo Viñales, y un grupo de familiares y amigos.

