Días atrás, La Señora saludando desde un pedazo del futuro tren urbano. Después, Boudou, jovial y tocando la guitarra en el club YPF flanqueado por los candidatos de Cristina ("los únicos", aclaró, por la profusión de cortes y colectoras); punteros que le pasaban niños, fotos suyas con el pelo al viento y junto a la moto Harley Davidson y papeles para autografiar. Y Aníbal, el inefable Aníbal, detrás de los frondosos bigotes que a veces exigen adivinar algunos gestos, pero que no amortiguan el cañón de sus ironías políticas ("la zoncera 45 es la de la UCR convocando a cortar y renegando de su candidato", dijo el jueves al presentar aquí en el Teatro Independencia, copado por La Cámpora, el nuevo Manual de Zonceras Argentinas, que renuevan las 44 zonceras que escribió Arturo Jauretche en 1968).
En fin, todo un despliegue del oficialismo K en Mendoza, que hace unos pocos meses era inimaginable. En el invierno pasado nadie en la Rosada/Olivos quería arrimarse siquiera a Jaque y a sus pagos montañeses -mucho menos Cristina- porque "ahí, los de la Gestión Jaque en lugar de sumarle, le restan".
Para colmo, la dupla de candidatos (acordada por Juan Carlos Mazzón y la Liga de Intendentes PJ que van por la re-reelección, 3er mandato), está integrada por 2 ex ministros de Jaque, Francisco "Paco" Pérez y Carlos Ciurca, que aunque ahora nieguen su identificación con el golpeado Jaque, fueron sus hombres de gestión durante los 4 años de gobierno del malargüino. Hoy hacen esfuerzos sobrehumanos para "despegarse", mientras Jaque ironiza y habla de "la continuidad de una gestión".
Por arrastre o por corte
Pero es tan pesado el arrastre de La Señora después del 14 de agosto (aquí no bajaba la semana pasada del 52 %) y es tan insistente el pronóstico de los encuestadores, que los del PJ confían en que "a pesar de todo" conseguirán el que parecía un sueño imposible, es decir, retener la gobernación y derrotar a los radicales de Cobos-Iglesias (nada menos que al odiado vice).
No es poco: en el otoño de 2010 todos -partido e intendentes- luchaban por despegarse del matrimonio sureño, cuando los sondeos les daban por el piso (Cristina andaba por el 26 % y Néstor era discutido en el PJ). Fue antes de la muerte y otras sorpresas.
El asunto es que se revirtieron los ánimos en la carpa de El Calafate y entonces vino La Señora y Boudou, su candidato "pendex", y Alicia La Hermana, y Aníbal, para agitar la tribuna e ironizar contra el "vote a Cristina si ya lo decidió, pero corte-corte y aquí elija un gobernador", mensaje que extrañamente comparten tanto radicales como demócratas opositores.
Unos, vergonzantes de Ricardo Alfonsín -que no alcanza a sumar el 15 % y no consigue prenderse al pelotón de punta- y otros aferrados a las ventanas de las viviendas baratas que promete El Alberto (Rodríguez Saá, 2do detrás de Cristina, pero 25 y 30 puntos de la Presidenta).
Los radicales de Iglesias (Roberto, ex gobernador 1999-2003 y que supo echarlo a Cobos de la Unión, cuando el vice se alistó con los K), les advierten a los periodistas que van adelante en las estimaciones primarias de adhesión popular, "a pesar del arrastre de Cristina". Los del PJ-K insisten en que no sólo son ellos los que van adelante con "el aporte de La Señora", sino que el corte de boletas no pasará del 20 % (la máxima histórica apenas si superó el 15 %), golpeando en lo que es el esperado milagro de la UCR, que prenden velas para que el corte supere el 30 %, al menos en las comunas que manejan los intendentes radicales.
Por siempre, Cristina
Mientras, también aquí se activó la discusión sobre la hipótesis de que Cristina arrase y luego vaya por la reforma constitucional que le permita seguir en la Rosada en el 2015. Aníbal desacreditó la especie el jueves en la noche en el Independencia, cuando le preguntaron si habría re-re. Con énfasis contestó "¡No! ¡No!". Pero el día anterior, en La Rioja, el ministro de la Corte, Eugenio Zaffaroni, había vuelto a patear el tablero propiciando una reforma para que en el país se vaya hacia un régimen "parlamentarista" (un presidente formal y un primer ministro fuerte y de poder político, que otorga y quita el Parlamento según éxitos y fracasos).
Lilita Carrió -que también estuvo aquí el jueves- insistió en que la tesis K es la de la continuidad por siempre y que después del triunfo seguro del 24, los "cristinistas" moverán las fichas para edificar la torre de la continuidad, probablemente con un régimen parlamentarista. (¡Sorpresa! Lo que había explicado Zaffaroni en La Rioja, criticando nuestro presidencialismo). Toda la oposición, a coro, denostó el continuismo absolutista: "Alberdi prefirió el régimen presidencialista con la garantía de la no-reelección, precisamente para evitar las tentaciones continuistas eternas", explicó la Carrió. Y la aplaudieron desde el arco opositor, convencidos de que el principal enemigo político que enfrentará Cristina en su 2do. mandato serán los aprontes de los que aspirarán a sucederla en el verano del 2015.
En la noche del jueves, en el sureño San Rafael, los empresarios de la Cámara de Comercio e Industrias (los que plantearon el juicio por los nuevos retoques a la promoción industrial) fueron a verlo a Amado Boudou al mismísimo aeropuerto, 10 minutos antes de que embarcara primero para Buenos Aires y luego hacia Suiza. Le entregaron un documento en el que le ponen números al perjuicio que la promoción le trajo a Mendoza en estas últimas décadas y le pidieron respuestas. El ministro de Economía y candidato a la vice de Cristina, sonrió, leyó y luego les prometió hablar del asunto después de las urnas del 24. Obvio: no hará nada que le quite un solo voto a la fórmula en el Oeste beneficiado con la promoción. Después, seguro, habrá bálsamo para disipar las broncas y atenuar los enconos.

