Buenos Aires, 29 de marzo.- La jefa de Estado Cristina
Fernández de Kirchner viajó hoy a Doha, capital de Qatar, para
participar en la II Cumbre de Presidentes de América del Sur y los Países Árabes (ASPA) durante dos días, con el objetivo de fortalecer la asociación económica.

La jefa de Estado partió minutos después de las 18 desde el
aeropuerto internacional de Ezeiza para asistir mañana al inicio de
la cumbre, informaron fuentes oficiales.

En la reunión de la ASPA, participarán 22 miembros de la Liga
Árabe y jefes de Estado de los 12 países de Sudamérica, quienes
debatirán acerca de la crisis financiera mundial y su impacto en las dos regiones, así como temas relacionados a la cooperación
Sur-Sur y otros de corte político que involucran a Palestina y Sudán.

El primer encuentro se realizó en 2005 en Brasilia y, en esa
oportunidad, los representantes de los países buscaron establecer
una asociación económica, política y de cooperación, explicaron
fuentes diplomáticas.

En el conclave también participarán, entre otros, el
presidente de Venezuela, Hugo Chávez, y su par brasileño, Inácio Lula Da Silva.

Por su parte, el canciller Jorge Taiana -que integrará la
comitiva oficial- asistió a las reuniones preliminares a la Cumbre en
El Cairo, Egipto.

Allí, Taiana planteó la necesidad de "nuevas posibilidades
para enriquecer y diversificar el comercio interregional de bienes
agrícolas e industriales" y apuntó a "la macroeconómica, para la
recuperación, mediante políticas fiscales y monetarias orientadas a fortalecer la demanda mundial".

Luego de participar en la II Cumbre de la ASPA, Fernández de
Kirchner viajará el 1 y 2 de abril a Londres para asistir a la
reunión del G-20.

Allí, asistirán potencias económicas y países en desarrollo
para analizar la crisis global y proponer medidas que logren paliar
su impacto.

El G-20 está compuesto por Argentina, Brasil, México, India,
China, Sudáfrica, Rusia, Australia, Canadá, Francia, Alemania,
Indonesia, Italia, Japón, Arabia Saudita, Corea del Sur, Turquía,
Reino Unido, Estados Unidos y la Zona Euro.

Al hablar ayer en la Cumbre de Líderes Progresistas que se
realizó en Viña del Mar, Chile, la presidenta Fernández reclamó que
las reglas internacionales que se adopten en la reunión del G-20
"contemplen los intereses globales" y "sean respetadas por todos",
al tiempo que defendió el rol estatal en la crisis financiera
mundial.

Además, expresó la necesidad de "retornar al multilateralismo,
a una democratización y, fundamentalmente, retornar a un mundo
donde las reglas sean respetadas por todos los países que integran los organismos multilaterales".