Además de entretener y educar a todos aquellos que participan en las colonias de verano que organiza el Gobierno, desde el Ministerio de Familia y Desarrollo Humano buscan darles contención a grupos vulnerables. Como cada año, los equipos interdisciplinarios están en alerta para detectar casos graves. Durante este enero, de los 25.000 asistentes, los profesionales debieron derivar 74 casos con problemas psicosociales graves. Se trata de niños, adultos mayores y personas con discapacidad que presentaban factores de riesgo, como abandono o violencia de parte de su familia hasta ideación suicida. Según las autoridades, el grupo con más problemas detectados es el de los niños de 6 a 9 años.

La gestión de Marcelo Orrego implementó un nuevo sistema para trabajar las alertas que surgen en las colonias. En lugar de utilizar planillas semanales, desde que comenzaron hasta que finalizaron las actividades (del 9 al 31 de enero), los 2.500 monitores avisaban a través de un sistema digital en tiempo real si detectaban algún factor preocupante. Esto dio como resultado que los 25.000 participantes contaron con un espacio de contención y que, de ese total, 74 fueron derivados a los equipos interdisciplinarios.

Ese último grupo fue el que las autoridades consideraron que necesitaba asistencia de médicos, psicólogos y hasta de autoridades judiciales en caso de que mediara algún delito. Los problemas detectados fueron negligencia o abandono, violencia intrafamiliar, autolesiones, violencia de género o ideación suicida. Para proteger a niños y adultos asistidos, las autoridades del Ministerio no detallaron cuántos hechos de cada categoría fueron identificados.

Las personas que fueron asistidas durante las colonias de verano tuvieron acceso a dispositivos del Estado en el momento. Pero, además, la Dirección de Niñez, Adolescencia y Familia continuará trabajando en los casos para dar continuidad a la asistencia, explicaron. Esto incluye la alerta a los Servicios Locales de asistencia de cada municipio, para darle seguimiento a cada una de las situaciones.

En cuanto a los grupos más vulnerables, la mayor cantidad de derivaciones se dio en el sector de participantes más pequeños, que van de los 6 a los 9 años. En segundo lugar, quedaron los niños de 10 a 12 años. Estos dos grupos son los que representan la mayor parte de la población que concurre a las colonias, ya que este año se sumaron 20.000 menores de edad. Si bien no detallaron el número exacto, en el balance final también hubo intervención en casos de adultos mayores y personas con discapacidad, aunque fueron en menor medida.

En total, este año hubo colonias de verano en todos los departamentos en 90 predios distintos, a los que los niños y adultos eran derivados según su zona de residencia. Una vez terminadas las actividades, desde Familia y Desarrollo Humano confirmaron que en Pocito y Rawson fueron los departamentos en los que más casos de vulnerabilidad detectaron. La nueva plataforma digitalizada que implementó la gestión tenía como objetivo hacer un seguimiento de todos los parámetros sociales, de salud y nutrición.

 

Participantes

Durante la edición 2024 de las Colonias de Verano, hubo 90 predios habilitados a los que asistieron 20.000 niños y niñas de entre 6 y 12 años, 2.500 adultos mayores y 2.500 personas con discapacidad de todos los departamentos. 

 

Alimentación

Durante las colonias, los participantes desayunaron y almorzaron en los predios. El Ministerio de Familia y Desarrollo Humano utilizó el sistema digital para implementar dietas acordes a las necesidades y gustos de los asistentes.