"Los otros días charlaba con un amigo y me decía: cómo no vas a armar algo para ser una alternativa. Yo me quedé pensando en que con lo que uno ve, cómo no me voy a considerar ya sea en el 2003 o el 2007. Tengo vocación de conducir la Argentina". Así fue que empezó a gestar Néstor Kirchner su desafío presidencial presidencial y se le contó a DIARIO DE CUYO en la primera visita que hizo a San Juan, en agosto de 2001. Pocos los conocían fuera de Santa Cruz y empezaba a dar los primeros pasos de un largo peregrinar para catapultar su figura a nivel nacional.

Desde ahí, se encargó de no faltar ningún año. Vino 16 veces y San Juan se convirtió en una de las provincias que más visitó, para forjar una relación que fue creciendo en intensidad y que duró ocho años entre aquellos primeros actos políticos en Chimbas por operación política de su amigo José "Pepe" Camacho (Ver pág. 7) y el encendido discurso de tono partidario que brindó este año, ya sin el traje de presidente, en el cierre del Congreso de Ciencia Política.

Con José Luis Gioja, particularmente, el vínculo fue de menor a mayor. Por cuatro años coincidieron en la misión de conducir y atrás quedó aquella recordada frase del santacruceño en una nota que le concedió a este diario en noviembre de 2002, cuando dijo que no le interesaba contar con el apoyo del sanjuanino para llegar a la Casa Rosada. Inclusive, un año más tarde, ya en el rol de candidato presidencial, prefirió no jugársela bendiciendo a alguno de los postulantes locales a la Gobernación, entre los que se alistaba el actual líder del peronismo.

La indiferencia duró poco. Kirchner no se privó de los gestos políticos y entre los jefes de Estado de la era democrática, fue el que más veces desembarcó en San Juan en menos tiempo y lo hizo con grandes anuncios y miles de millones de pesos bajo el brazo: siete veces en sus cuatro años de mandato -las otra fueron seis como candidato y después de ser presidente, tres como líder del PJ-.

Poco tiempo antes de dejar la Presidencia, rubricó las buenas vibraciones que cultivó con Gioja. "Querido gobernador, le quiero agradecer profundamente toda la sabiduría brindada en estos años", tiró en un acto multitudinario que lo tuvo como protagonista en octubre de 2007 en el departamento 25 de Mayo, en una emocionante despedida de los sanjuaninos.

En el trajín de visitas nació la imborrable anécdota del helicóptero. En junio del mismo año, Néstor y Cristina llegaron al aeropuerto y cuando subieron con Gioja al helicóptero que los iba a llevar al centro Cívico para inaugurar la primera etapa, la aeronave se descompuso. Nunca tan oportuna una falla. En la espera se dio el siguiente diálogo: "Te voy a pedir dos cosas que no podés decir que no" dijo el gobernador, a lo que Kirchner preguntó "¿Cuánto cuestan?". Se trataba de las obras del Estadio Unico y el Teatro del Bicentenario que minutos más tarde, el santacruceño anunciaba que se iban a construir con el apoyo nacional.

"La vez que vino trajo y con lo que trajo nosotros hicimos", fue la frase que eligió Gioja en agosto de 2005 para agradecerle a Kirchner las obras que dejó. El dique Los Caracoles, el Hospital Rawson, las viviendas y las cloacas de Rawson fueron algunas de una sustanciosa lista, en uno de los apoyos políticos y financieros más importantes que se recuerden para San Juan.

Los gestos de Kirchner siguieron, aún cuando dejó de ser presidente. Y aunque el mando oficial lo ostenta Cristina, nadie duda en ver al ex mandatario como el líder del proyecto y el de mayor peso a la hora de dosificar el protagonismo que le toca al resto de la dirigencia. En octubre de 2007 vino al Estadio cerrado a dar su primer discurso como presidente del PJ nacional y junto a su esposa, este año, eligieron a San Juan para un encuentro difícil de olvidar: la Cumbre del Mercosur.

En agosto, la provincia se convirtió en un centro de atracción mundial. Recibió a seis presidentes sudamericanos y a Kirchner como secretario de la Unasur. Pero ya metido de lleno en la idea de calzarse al traje de candidato para 2011.

Antes de irse, apareció en silencio atrás de los periodistas que le preguntaban a Cristina en una inesperada conferencia de prensa. Pero poco tiempo pasó hasta que los micrófonos giraron. Cuando le tocó responder sobre la posibilidad de que Gioja lo acompañe en una fórmula, lo definió como una figura de "proyección nacional". Y mostrando una memoria envidiable, recordó cada detalle del San Juan de la crisis y se declaró "encantado" al comparar la provincia de hoy con la que se encontró allá por 2001.