El gobierno negó ayer que haya recibido "presiones" de la embajada de EEUU para resolver el conflicto en la planta de Kraft, ex Terrabusi, y aclaró que la representación diplomática sólo se propuso "averiguar" la situación que atraviesa esa compañía.

La desmentida se produjo luego de que el lunes la legación de EEUU, que encabeza la embajadora Vilma Socorro Martínez, informara en un comunicado sobre su interés en una "solución apropiada y duradera" para la crisis iniciada hace más de 40 días en la fábrica de General Pacheco por 156 despidos.

Las declaraciones del gobierno argentino, pronunciadas por el ministro de Trabajo, Carlos Tomada, se produjeron en una jornada en la que rigió la frágil tregua a la que se arribó la noche del lunes, y en la que la Unión Industrial Argentina (UIA) oficializó la existencia de "temor" entre los empresarios por la violencia registrada en los últimos conflictos laborales.

El ministro calificó de "una fábula increíble" la presunta intervención de la embajada de EEUU en el conflicto de Kraft y sostuvo que el comunicado de la embajada sólo refleja una natural disposición de "averiguar" qué ocurre en este tema.

"Todos los embajadores, los nuestros, cuando hay intereses de las empresas argentinas intervienen en el sentido de que averiguan, pero de ahí a que intervengan en el tema, presionen o por el estilo, no es así", afirmó el funcionario.

Tomada también desmintió haber recibido llamados telefónicos directamente de Vilma Martínez para acelerar una solución.

Además, Tomada, confirmó que la empresa Kraft Foods se comprometió a "mantener todos los puestos de trabajo que existen actualmente" y a revisar los despidos realizados, en tanto ratificó que el Gobierno retirará paulatinamente a los policías que custodian el interior de la fábrica de General Pacheco.

En tanto, el presidente de la Unión Industrial Argentina (UIA), Héctor Méndez, afirmó que existe "temor" entre los empresarios ante la posibilidad recrudezcan conflictos como el de Kraft.

"Hay temor porque hay realidades", indicó Méndez, y subrayó que hay "algunos establecimientos y plantas en otros lugares en el país, donde están ocurriendo medidas similares" a las que se registraron en la planta de Pacheco.

Ayer, la planta de Kraft en General Pacheco Trabajó con normalidad pese al intento frustrado de los trabajadores despedidos para ingresar.