El juez penal de Jáchal, Pablo Oritja, dijo hoy que ‘aún no está acreditado si hubo contaminación de suelos o del ambiente' por el último derrame de solución rica en la mina Veladero y afirmó que 'recién después de que eso se confirme se podrá saber si hubo delito'.

Federal Judge Oritja speaks during an interview with Reuters in Jachal

El magistrado, que investiga la rotura de un caño en el Valle de Lixiviación que opera en la provincia la minera canadiense Barrick Gold, confirmó además a Télam que ‘suspendió la orden de realizar análisis de sangre a los habitantes de poblaciones vecinas de la mina iglesiana‘, ya que está averiguando ‘cuáles serían los exámenes adecuados para determinar si hubo afectación en su salud'.

Comentó que están analizando 'tres actas remitidas el jueves por la Policía Minera, donde le reclaman a la minera Barrick el incumplimiento de una orden de cambiar las cañerías antes del incidente', pero apuntó que 'eso sólo no alcanza para determinar si hay delito'.

‘Evidentemente la empresa tenía la obligación de reemplazar o reparar las cañerías' por las que circula agua con cianuro en el Valle de Lixiviación, pero 'hay que ver si ese supuesto incumplimiento se relaciona con la rotura que provocó la fuga de material en el incidente' ocurrido a fines de marzo pasado, detalló.

Y continuó: ‘Si eso es así, podría decirse que hubo causalidad en el derrame, aunque eso no es suficiente para configurar delito de contaminación'.‘Para eso aún hay que comprobar el elemento objetivo que indique si hubo afectación ambiental con peligro para la población', agregó y explicó que ‘es posible que el material fugado de los caños haya quedado en la zona segura‘, por lo que ‘en ese caso habría incumplimiento pero no contaminación'.

Además aclaró que otros trabajos como elevar las bermas (terraplén que impide que la solución cianurada escape del Valle de Lixiviación), la construcción de desniveles y la instalación de cámaras de monitoreo fueron 'puntos cumplidos por la empresa'.

Con respecto a los análisis a los cerca de 340 pobladores de siete pueblos ubicados en las márgenes de los ríos Blanco y Jáchal para determinar si ‘hay presencia de metales pesados en sus organismos', los integrantes de la ‘Asamblea Popular Jáchal No Se Toca‘, habían dicho que lo correcto sería realizar ‘un mineralograma intracelular por espectrometría con el método Raman', que según apuntaron 'no es invasivo y se hace con una muestra de piel'.

‘Estamos tratando de encontrar el mejor método para utilizar, ya que el análisis propuesto es de muy difícil concreción porque el aparato para hacerlo está en Buenos Aires y no se puede trasladar‘, completó Oritja.