Con su actual estructura colapsada por la gran cantidad de personas que diariamente concurren a realizar sus trámites y ante la falta de espacio para dar un mejor servicio, la delegación local del PAMI, la obra social de los jubilados y pensionados, tiene previsto invertir 2 millones de pesos para acondicionar un sector del edificio del Correo Argentino, en la Avenida Central, y mudar allí todas sus oficinas. Y como el contrato de alquiler vence el 30 de septiembre próximo, en octubre ya deberán estar en las nuevas instalaciones, según confirmó el director ejecutivo de PAMI San Juan, Nicolás García.

Actualmente, y desde hace por los menos 26 años, el organismo tiene alquilados a un particular, Nicolás Castán, 3 salones. El más grande en la esquina Sur de Avenida Córdoba y Mendoza, y otros 2 justo en la esquina contraria. Pero el espacio no es suficiente para los 155 empleados que tiene el PAMI en la provincia y menos para atender a los 300 jubilados y pensionados que en promedio concurren diariamente para realizar trámites, en su mayoría vinculados con prestaciones de salud.

Un ejemplo de la precariedad actual es que las personas que concurren a realizar sus trámites cuentan con un solo baño y casi no hay espacio para ubicar los escritorios de las distintas áreas. Y todo el mundo está amontonado.

Por eso, y luego de dos años de gestiones (ver aparte), el organismo empezó las conversaciones con las autoridades del Correo Argentino para ocupar un sector del edificio de la repartición.

El sector que pasará a ocupar el PAMI, que está ubicado entre las instalaciones de Radio Nacional y las oficinas del Correo Argentino, está desocupado. La última repartición oficial que ocupó el espacio fue el Instituto Provincial de la Vivienda (IPV), pero se mudó en el 2007 al Centro Cívico, y desde entonces el área está sin uso.

Según explicó García, las opciones para formalizar el traslado son dos. La primera, y ya que los dos son organismos nacionales, es que el Correo le ceda sin cargo la construcción a la delegación local del PAMI. Y la segunda es que le cobre un canon mensual a modo de alquiler. En ese caso, sería a través de un contrato de cesión de uso por contraprestación de obra. Y el PAMI se beneficiaría con el descuento de los 2 millones de pesos que va a invertir en las mejoras, mientras que el alquiler el primer año rondaría los 55.000 pesos mensuales. Actualmente la repartición paga por los 3 salones en uso 64.000 pesos mensuales.

“Ahora no tenemos espacio para atender a la gente con comodidad y con el nuevo edificio habrá lugar suficiente para los próximos 50 años”, dijo García.

El nuevo edificio está repartido en 3 pisos y suma 3.074 metros cuadrados. En las planta baja estará concentrado el 95 por ciento de los sectores de atención al público, en el primer piso estarán las áreas operativas para la gestión de los trámites y en el segundo piso funcionará el archivo y habrá un salón de usos múltiples para las reuniones de los centros de jubilados y de los gremios. Ahora no hay lugar para este último beneficio.

Pero, antes de la mudanza, según explicó el director ejecutivo, hará falta construir 2 cuerpos de baños con 6 unidades cada uno, baño para discapacitados y un ascensor. Además tienen que preparar las instalaciones con una red de conexión a internet y telefonía.

Actualmente las gestiones están encaminadas entre el PAMI y el Correo Argentino, pero todavía hace falta el visto bueno del Secretaría de Bienes Patrimoniales del Estado, que es el área encargada de los edificios públicos a nivel nacional.