El peronismo sanjuanino dio una muestra de carácter y el exintendente de San Martín, Cristian Andino, salió en primer lugar en las elecciones nacionales legislativas del domingo. Un Partido Justicialista que encaró una campaña fragmentada entre los candidatos y con apoyos dispares de los intendentes logró la primera banca en la Cámara de Diputados de la Nación y relegó al oficialismo provincial, que llevó al vicegobernador Fabián Martín como cabeza de lista, a un segundo puesto que igual le permitió ingresar a la banca. En tanto, La Libertad Avanza obtuvo un tercer lugar con una sorpresiva performance en Capital, Rawson, Chimbas y Rivadavia, que les permitió ganarse un escaño. De manera que la voluntad de los sanjuaninos configuró un escenario de tercios. Ergo, las tres primeras fuerzas metieron diputados en el Congreso nacional.
Contra todos los pronósticos, el frente Fuerza San Juan, encabezado por Andino y secundado por la intendenta de Caucete, Romina Rosas, y el exintendente de Chimbas, Fabián Gramajo, obtuvo el triunfo con el 34,4% de los votos. La lista que confeccionó el senador nacional Sergio Uñac surtió efecto. Es más, durante los primeros meses del 2025, incluso antes de la presentación formal de candidatos, el exgobernador tuvo una reunión con los caciques del justicialismo en la oficina histórica del difunto Juan José Chica y dio una sola orden: “Ganen sus departamentos”. En ese momento, dio una razonable advertencia: “Si pierden, el oficialismo les va a copar los municipios hasta el 2027”.

Ya sea por el consejo de Uñac o por el argumento político sobre un eventual avance del orreguismo en los distritos, los intendentes peronistas -con esfuerzos dispares- salieron a plebiscitar la gestión municipal. Andino recorrió durante el 2024 todos los departamentos de la periferia sanjuanina y dedicó los meses de campaña del 2025 para visitar los distritos que controla el oficialismo. Dos dirigentes hicieron especial hincapié en sus territorios: Gramajo y el intendente de Rawson, Carlos Munisaga. El chimbero arrasó en su municipio y aportó 22.641 votos (44,42%) al triunfo justicialista. Mientras que el rawsino tributó 25.185 votos (36,17%). Los bastiones peronistas respondieron ante la urgencia de buenos números tras la pérdida del gobierno provincial en el 2023.
Apenas 3 puntos atrás, quedó el frente Por San Juan, con Martín, la ministra de Gobierno Laura Palma y el diputado bloquista Federico Rizo. Los candidatos del gobernador Marcelo Orrego cosecharon el 31,02% de los votos a nivel provincial e hicieron una digna elección en los departamentos del Eje Libertador: Capital (aunque perdió), Santa Lucía y Rivadavia, que gobiernan los intendentes afines, Susana Laciar, Juan José Orrego y Sergio Miodowsky, respectivamente. El orreguismo tenía la expectativa alta. En la previa a los comicios barajó la posibilidad de ingresar dos diputados nacionales. Jugó una carta fuerte -nada menos que al Vicegobernador- y buscó -sin suerte- provincializar una elección nacional que finalmente quedó signada por la polarización entre el peronismo y los libertarios.

No obstante, de acuerdo a la interpretación del gobernador Orrego, que dio en el discurso final del domingo, donde aceptó el segundo puesto, “hubo un escenario de polarización importante donde en San Juan logramos romperla”. En parte, es cierto. Pero los trazos gruesos de la elección demostraron que hubo una altísima dicotomía del electorado local entre quienes bancaron la gestión de Javier Milei y quienes optaron por una alternativa opositora, encarnada mayormente en el peronismo de Andino. Todo indica, además, que el Gobierno provincial no pudo ir a fondo con la aplicación de la estructura del Estado ni siquiera en el despliegue en los distritos opositores donde aspiraba, al menos, a un segundo lugar que no se dio.
Por su parte, La Libertad Avanza, con el armado del representante de Javier Milei en San Juan, el diputado nacional José Peluc, consolidó la tercera fuerza política. Los candidatos del Presidente -el vicepresidente del INV, Abel Chiconi, la dirigente Cristina Tejada y el bloquista Juan Sancassani- recolectaron el apoyo del 26% de los sanjuaninos. Es una elección sorpresiva en un momento delicado del Gobierno nacional. Este diario dio cuenta de la estafa de LIBRA, los presuntos audios de corrupción de Diego Spagnuolo en la ANDIS, y de la baja de la candidatura de José Luis Espert en la Provincia de Buenos Aires por el supuesto vínculo con el empresario narco Fred Machado. Aún así, el electorado sanjuanino respaldó la gestión de Milei. Principalmente en Capital, Rivadavia, Chimbas y Rawson. Aunque no hay una relación lineal, podría decirse que tomó votos del orreguismo y del peronismo.
El partido del Presidente tuvo un resultado contundente. Se adueñó de la Capital con 22.401 votos (34,58%), a tono con la premisa de que en las elecciones nacionales la fuerza del Gobierno nacional logra imponerse. En tanto, en Chimbas y Rawson salió en un cómodo segundo lugar. En el primer municipio sacó 20.068 votos y en el segundo, 12.386 (24,30%). Finalmente, en Rivadavia cosechó 14.874 voluntades (27,75%). ¿Por qué hizo una buena elección? Tal como anticipó DIARIO DE CUYO, el resultado local estaba atado a la suerte nacional. Sucedió. Milei tuvo un categórico triunfo en el país. Incluyendo a San Juan, ganó en 16 provincias. Hasta dio el batacazo en la Provincia de Buenos Aires por un margen estrecho y dejó al peronismo, que había ganado el 7 de septiembre por el 14% de votos de diferencia, un paso atrás. En la antesala a los comicios, en off the record, Peluc especuló con un resultado similar al que se cristalizó. Ante un grupo de colaboradores, adelantó el ingreso de Chiconi e incluso el primer puesto del peronismo a nivel provincial.
En rigor, la voluntad de los sanjuaninos configuró un nuevo escenario de poder. El peronismo recuperó la memoria del triunfo, el orreguismo hizo una elección discreta y los adherentes a Milei dieron el batacazo al pintar de violeta la Ciudad de San Juan. Los resultados generaron el ingreso de Andino, Martín y Chiconi a la Cámara de Diputados de la Nación. De todas formas, en términos fácticos, el Partido Justicialista perdió una banca. Anteriormente tenía dos, ocupadas por Walberto Allende y Fabiola Aubone, pero ahora sólo renovó una. El oficialismo retuvo la que puso en juego: salió María de los Ángeles Moreno e ingresó el Vicegobernador. Mientras, La Libertad Avanza metió un diputado más. No puso nada en juego y ganó una banca que se suma a la del propio Peluc.

