En el marco del Día Mundial de la Salud, y con la clara intención de hacer visible una problemática mundial, la OMS estableció la lucha contra la depresión como el lema de este año. En sintonía, el Ministerio de Salud Pública de San Juan indicó que las consecuencias negativas generadas por la depresión aumentaron considerablemente en la provincia durante el último año, especialmente en el grupo social que comprende a adolescentes y jóvenes de entre 12 y 25 años.

"No existen datos estadísticos para comparar con años anteriores, pero por los relevamientos que nosotros realizamos en hospitales y centros de salud, podemos decir que sin lugar a dudas aumentaron las afecciones mentales como la depresión en la provincia", comentó Cecilia Turiz, jefa de Psicología de Salud Pública.

La profesional agregó que "el hecho de que aumente este trastorno, especialmente en personas jóvenes, se debe a factores económicos, cambios culturales, tecnológicos y la presión que ejerce el mercado para tener cada vez más.

6 por ciento de la población sanjuanina sufre algún tipo de depresión según indicó el jefe de Salud Mental del Ministerio de Salud Pública.

Esto empuja a los sujetos en formación de vida a una búsqueda desmedida de la ilusión de tenerlo todo. Y el hecho de enfrentarse a que esto no es posible, genera diferentes cuadros de tristeza y depresión. También hay que entender que las consecuencias negativas de esta enfermedad se dan en la juventud y adolescencia porque es una etapa muy impulsiva".

La problemática global que implica el creciente número de personas con depresión llevó a la Organización Mundial de la Salud a tomar determinadas políticas con la clara intención de que dicha patología mental no se constituya como una epidemia para 2020. Las cifras internacionales indican que 350 millones de personas padecen de depresión en el mundo actualmente.
Según explicó Manuel Brandt, jefe de Salud Mental del Ministerio de Salud Pública, la consecuencia más grave de los cuadros depresivos es el suicidio y el intento de suicidio. A su vez, indicó que la provincia no es ajena al fenómeno global que afecta a los jóvenes.

"A nivel mundial, el suicidio es la segunda causa de muerte entre adolescentes y jóvenes de entre 13 y 29 años. Nuestra provincia no es ajena a esta situación ya que según nuestros datos existe un suicidio por semana, a lo que se suman tres o cuatro intentos cada siete días", dijo Brandt. Las cifras oficiales de Salud Pública indican que el año pasado existieron 41 casos de suicidios consumados en San Juan. Un fenómeno que al parecer afecta fuertemente a los varones, ya que del total de casos, 36 fueron hombres y 5 fueron mujeres.

El grupo etario más vulnerable fue el de adolescentes y jóvenes entre 15 y 25 años, que contabilizó un total de 18 suicidios. La cifra resulta elevada en comparación con los casos que contabilizan los demás grupos: entre 26 y 35 años (7 casos), entre 36 y 45 años (5 casos), de 45 a 55 años (4 casos), más de 56 años (2 casos), a lo que se suman cinco casos sin detalle.
Por su parte, los intentos de suicidio durante el año pasado ascendieron a 94, de los cuales 61 casos fueron mujeres y 31 fueron hombres.

Esta estadística vuelve a evidenciar la vulnerabilidad de los más jóvenes ante la depresión, ya que la mayor cantidad de intentos (54) se dio entre jóvenes de entre 12 y 22 años. Mientras que los restantes 40 casos se distribuyeron entre cinco diferentes grupos etarios ascendentes. 

"El abordaje multidisciplinario es una herramienta fundamental que estamos usando para poder tratar la depresión en la provincia, especialmente en los jóvenes y adolescentes. Esto implica trabajar articuladamente entre todos los factores intervinientes: docentes, enfermeros, psicólogos, psiquiatras, etc. La intención es hacer funcionar toda una red de contención", concluyó Brandt.

En los niños

Según datos ofrecidos por el consultorio de Psiquiatría Infantil del Hospital Rawson, se duplicaron las consultas sobre depresión en niños durante el último año, incluso se detectó casos de depresión en chicos de 5 años.

En relación a este dato, Cecilia Turiz explicó: "Cuando los niños tienen depresión suelen aparecer síntomas como tristeza, sentimiento de culpa, baja autoestima, apatía, entre otros. Sin embargo, me resisto un poco al diagnóstico depresivo en los más pequeños ya que todavía no tienen una personalidad muy formada. Hay que ser muy prolijo con el diagnóstico para saber qué tipo de tratamiento es necesario para cada niño, adolescente o joven".