Mariano Werner, el gran ganador del circuito callejero con un Toyota, manifestó que “me llevo la mejor sensación de mi vida, estoy más que feliz”. Y agregó: “La imagen que me va a quedar es la de la victoria, los festejos y la euforia terrible que te genera ganar ante tanta gente. Por eso paré en la vuelta de honor a festejarlo con el público”.

En esa dirección, en conferencia de prensa, el piloto paranaense agregó: “Nunca viví algo como lo de hoy (por ayer) en la vuelta de honor. Fue la mejor victoria de mi carrera y pude cumplir dos sueños: correr y ganar en el Callejero de Buenos Aires”.

“Después del podio venía arriba del autobomba y toda la gente me felicitaba. Es una imagen que quedará por siempre en mi memoria”, remarcó.

En cuanto a la carrera, repasó: “Cacá venía rápido y cuando Facundo (Ardusso) se retiró en el relanzamiento dije la punta es mía y no la suelto”.

Al final, manifestó que “a veces no se dan las cosas y uno se amarga y pasa malos momentos. Llegué a la final con la idea de sumar y eso se intensificó después de la vuelta 10 cuando empecé a tener problemas con la dirección hidráulica. Ahí se me vino rápido Cacá, pero por suerte pude aguantarlo y terminé ganando”, completó.