La red inalámbrica más sencilla consta de un punto de acceso y unos adaptadores de red inalámbricos. El punto de acceso posee antenas para distribuir conectividad a las PC, y se conecta con un cable al dispositivo de acceso a Internet, que puede ser un módem ADSL (banda ancha).<br><br>
Si alguna de las PC no dispone de un adaptador o placa de red inalámbrica, la opción más sencilla hoy en día, es comprar un Adaptador USB Inalámbrico. Su instalación será cuestión de un par de clicks luego de introducir el CD que incluye.
En Windows, se está previsto que el acceso a través de WiFi se configure automáticamente, y el sistema operativo se encarga de buscar las redes disponibles en los alrededores y gestionar la conexión.
