Alejandro Sabella se la jugó en la previa al choque ante Bélgica al realizar dos variantes no obligadas (la única fue la de José Basanta por el suspendido Marcos Rojo) como los ingresos de Martín Demichelis, por Federico Fernández, y el volante Lucas Biglia por Fernando Gago, en ambos casos por bajo rendimiento. La jugada al DT de Argentina le salió perfecta pues Demichelis le brindó solidez a la última línea del seleccionado, algo todavía ausente en el Mundial. Biglia resultó un gran complemento para Javier Mascherano a la hora de la contención. En tanto, Basanta se hizo fundamental en los minutos finales del encuentro debido a su buen juego aéreo. El coach también acertó en el reemplazo de Angel Di María al incluir a Enzo Pérez, de buena labor.