Quienes tienen como costumbre comer un pancho o un chori en el Parque de Mayo no podrán hacerlo más. Es que los inspectores de la Municipalidad de la Capital, junto al Ministerio de Salud Pública de la provincia, comenzarán a sacar del lugar a todos los carros que vendan alimentos. Según dijeron las autoridades, en principio el control se realizará sólo en el Parque de Mayo, como una actividad de reordenamiento del lugar. Mientras tanto, los carrobares podrán seguir trabajando en otros sitios de la Capital, hasta que los controles se extiendan. Luego, los pancheros y choripaneros podrán trabajar en un patio de comidas que se instalará en el nuevo paseo de los artesanos.
La venta de comidas en carrobares está prohibida en Capital por la ordenanza 5120, promulgada en el año 1994. Pero su cumplimiento no es controlado. La ordenanza tomó trascendencia en febrero pasado, cuando la comisaría Segunda de Concepción realizó un operativo y sacó de circulación ocho carrobares. El motivo: no tenían habilitación y vendían alcohol en la calle fuera del horario permitido. En ese momento, desde el municipio capitalino dijeron a DIARIO DE CUYO que había algunos proyectos en el Concejo Deliberante que iban a estudiarse para crear una norma que regularizara la actividad. Pero esos proyectos todavía no fueron tratados.
Según comentó ahora el secretario de Gobierno del municipio capitalino, Ricardo Pintos, "por la existencia de esta ordenanza los vamos a tener que sacar a todos. Si no hay una norma que los ampare no pueden realizar la actividad". El funcionario contó que lo que realizarán en los próximos días (no quieren dar fechas para no alertar a los comerciantes) será la primera etapa del control. Esta sólo se desarrollará en el interior del Parque de Mayo y en sus veredas. No alcanzará a las zonas aledañas ni a otros lugares de la Capital en los que tradicionalmente hay carros de comidas.
El escaso radio de control, según explicó Pintos, se debe a que en la Municipalidad aún no cuentan con la cantidad de personal suficiente para que realice los controles en toda la ciudad.
La inspección de los carrobares será similar a la que se ejecutó para sacar de las calles a los vendedores ambulantes. Primero se les dará a los vendedores un plazo para que se retiren y se les labrará un acta. Luego, si no se retiran, las autoridades podrán decomisar sus productos y sus carros.
El proyecto del municipio también está relacionada con el nuevo paseo de los artesanos, que comenzará a funcionar dentro de unos 30 días junto al Monumento al Deporte. "La idea es ordenar el parque. Tenemos en cuenta que el que vaya a ver a los artesanos va a querer comer", comentó Pintos. Por lo que frente a los stands de los artesanos habrá un espacio para crear un patio de comidas. Este lugar tendrá habilitación municipal, agua potable y baños. Según dijo Pintos, hasta el momento está planeado que el espacio cuente con lugar para 80 negocios, pero piensan ampliarlo. "La gente que vamos a sacar ahora podrá estar ahí, siempre y cuando cumpla con las normas de higiene y limpieza", detalló el funcionario. Y comentó que "todavía no sabemos cómo va a ser la adjudicación de lo negocios".