San Juan 2 de julio.- El juez correccional que está instruyendo la causa de la adolescente presuntamente agredida el fin de semana pasado en Santa Lucía, Eduardo Agudo, fue contundente a la hora de describir lo ocurrido y descartar una serie de hipótesis que giran en torno al caso. El magistrado dijo que no hay una sola prueba que indique que la menor haya sido golpeada o abusada, ni que fuera víctima de bullying.
“No hay pruebas de golpes o de algo parecido. Los moretones o raspones que la menor tiene son producto de la fuerza que terceros hicieron para intentar movilizarla desde el interior del predio hasta la vereda. Así lo indican las pericias médicas que se le hicieron a la menor”, explicó.
Agrego además que “quiero aclarar algo. Si algo de lo que se dijo en las redes sociales hubiera ocurrido, yo hubiese sido el primero en pedir que la causa pase a un juzgado de Instrucción, pero nunca hubo nada de lo que se dijo. Mientras más avanzamos en la investigación, más se confirma la primera hipótesis de estar frente a un caso de consumo excesivo de alcohol por parte de un menor. Y quiero aclarar que tampoco existe el cuadro típico de bullying alrededor de la situación. No se da ninguna de las situaciones típicas del bullying”, afirmó.
Agudo agregó que “quiero llevar tranquilidad a la población y pido por favor que se le de la entidad que realmente tiene. Es un delito de lesiones leves, ocurrido en una situación de consumo descontrolado de alcohol por parte de menores que se encontraban solos. No ha pasado de lesiones leves a la niña, más allá de las impresionantes fotos, que aclaro, son de similares características a las imágenes que pueden encontrarse en google cuando uno busca a menores alcoholizados a la salida de una fiesta. Van a ver en todos los casos la misma escena, una chica tirada en el piso, inconsciente, que se ha vomitado encima, que seguramente ha perdido el control de esfínteres con lo que ello implica. Pero si a eso se agregamos comentarios sobre golpizas o violación, tenemos una bomba que es lógicamente muy irritante”, afirmó.
Por último, el magistrado elevó un pedido a la población al sostener que “por eso pido por favor a la sociedad que entienda que estamos frente a un caso más de consumo de alcohol y no al caso que se ha inflado en las redes sociales. Es comprensible la reacción social, es más, la tiene uno mismo al principio, pero debo conservar la objetividad para llevar la investigación al punto que logre determinar lo que realmente pasó”.