El vecino que llamó al veterinario intuyó, por el característico pico curvado, que el pájaro que estaba frente a su casa del barrio Edilco, Capital, era un águila. Pero lo que no imaginó es que ese imponente animal que apenas podía moverse era un águila coronada, un ave que se encuentra globalmente amenazada y en peligro de extinción. Fue rescatada en plena vereda y enviada a una veterinaria, donde quedó internada por una importante herida y fractura en su ala izquierda, además de un cuadro de desnutrición. Todo esto, presumen, sería por haber estado en cautiverio, algo que está prohibido por ley. Pero como estaba suelta y en la vereda, no pudieron identificar a ningún responsable.
Este es el tercer pájaro de gran porte y de avistaje infrecuente en centros urbanos que fue rescatado por autoridades gubernamentales en poco más de un mes (ver aparte), una circunstancia que los especialistas definen como casual.
En tanto, al águila coronada intentarán salvarle el ala para que pueda volar de nuevo, pero si eso no es posible, existe la posibilidad de unirla a una hembra rescatada hace tres años y que viva en cautiverio pues está tuerta. La idea es intentar reproducir este tipo de aves en un hábitat de encierro.
El águila coronada está considerada como la especie de rapaces más amenazada del país y la que encontraron en el barrio Edilco es un ejemplar joven y en mal estado. Por sus garras limadas, su cola cortada y el estado de las plumas, los especialistas dedujeron que estuvo en cautiverio y que de no haber actuado a tiempo, hubiese muerto en los próximos días. Es que su grave herida en el ala le impide volar y aún no saben si podrá volver a hacerlo.
"El animal está internado y si bien su vida ya no corre riesgo, la radiografía que le hicimos mostró que tiene los huesos explotados en la fractura del ala. Esto es muy grave, al punto que existe la posibilidad de amputar la parte lesionada. Pero la prioridad es hacer todo lo posible para que pueda regresar a un hábitat natural", explicó el veterinario Aldo Olivares Robledal, quien tiene al animal internado en su clínica.
Si no pueden rehabilitarla para que recupere su libertad, entonces será enviada a la granja El Arca, en Santa Lucía, un refugio para este tipo de animales rescatados. Allí ya se encuentra un águila coronada hembra y por eso proyectan tratar de juntarlos para que se reproduzcan, una ambiciosa iniciativa provincial dentro de un presente complicado para la amenazada especie.
Por otro lado, el rescate de los tres ejemplares en poco más de un mes no alarma a los especialistas, ya que lo toman como una circunstancia fortuita. "Las dos águilas estuvieron en cautiverio y se escaparon o fueron liberadas; por eso no se puede pensar que algo esté alterando la naturaleza. El problema es el comportamiento humano, que atrapa o caza aves sin importarles que esté prohibido", dijo Rubén Luna, director de Fauna.

