Al pie de las Sierras Azules en Zonda desde primeras horas de la noche del Sábado de Gloria, un grupo de chicos comenzó a darle clima de alegría a la peregrinación que comenzaría en la madrugada del Domingo de Pascua. Con guitarra, charango y órgano interpretaron canciones religiosas con diferentes ritmos. A ellos se sumaron chicos de otras iglesias para continuar con la fiesta en nombre de Jesús resucitado.
Muertos de sed
A pesar de que los organizadores del ascenso de las Sierras Azules para celebrar la Misa Pascual recomendaron, con bastante tiempo de anticipación, llevar por lo menos 2 litros de agua, fueron muy pocos los que escucharon el consejo. A las dos horas de empezado el ascenso ya se habían quedado sin este líquido. Al bajar, fueron desesperado al tanque provisto por OSSE en donde pudieron beber agua potables y fresca.
