Explosivos de principio a fin. Con la energía que caracteriza a Las Pelotas y Catupecu Machu, la segunda noche de la Fiesta Nacional del Sol no quedó nadie sin dormir. Miles de jóvenes con niños celebraron una tremenda fiesta de rock. Agregando que en la previa estuvieron bandas locales como La Oveja Negra y Di Mantre. Después de la descomunal actuación de Catupecu, en plena madrugada y bajo la llovizna de un cielo cubierto por las nubes, Germán Daffuncio junto a Gabriela Martínez (la bajista) y el resto de los músicos, tuvieron el reencuentro esperado con sus seguidores. Entre ellos y los fans hubo, como ya es habitual en cada ritual de Las Pelotas, una sintonía fina casi ‘mística’ que hace crear una atmósfera única que es sentido con mucha pasión. ‘Vamos las peloo…; vamos las peloo…’, coreaban los espectadores con los brazos en alto, revoleando remeras, banderas y trapos. Y Germán, con sus gafas color turquesa encendió los motores con el tema ‘Desaparecido’, en memoria a Jorge Julio López, (víctima de la dictadura del ’76 y desaparecido en democracia). El calor humano creado por un pogo de alto voltaje era contagiante y para doblar la apuesta, Germán dio el saludo de apertura: ‘¿Cómo están? ¡Qué linda está la Fiesta del Sol! Qué bueno que parara la lluvia, loco…’, dijo el líder de la banda.

Así fue preparando el terreno para presentar las dos nuevas canciones del próximo disco que presentará en marzo: ‘Brindando por nada’. Los temas ‘El amor hace falta’ y ‘Víctimas del cielo’, fueron gratamente aceptados ya que los pibes escucharon atentamente y trataron de seguir la letra para aprendérselas de memoria.

Luego fue el turno de otros éxitos como ‘¿Qué podés dar?’, ‘Ya no estás’, ‘Basta’, ‘Capitán América’ y ‘Para qué’, entre otros. Hasta que para sorpresa de muchos, sucedió sí un momento pintoresco: Fernando Ruíz Díaz y Germán Daffuncio interpretaron un dueto para recordarlo con cariño. Es porque ambos rindieron tributo a Luca Prodan ejecutando ‘El ojo blindado’ y ‘Shine’. La euforia en la multitud fue total al ver a ambos músicos por la entrega que hicieron en el escenario hasta el último minuto.

Catupecu imparable

A la medianoche entró en acción Catupecu Machu con una impronta que desató el frenesí masivo de los admiradores de la banda de Villa Luro. ‘Mil voces finas’, ‘El grito después’, ‘Confusión’, ‘Plan B Anhelo de satisfacción’, ‘Perfectos Cromosomas’, y el cover ‘Es todo lo que tengo’ de Lisandro Aristimuño fueron parte del repertorio cargado con mucha adrenalina puesta en las manos de Ruíz Díaz que manejaba su guitarra con alto virtuosismo. El recital fue entretenido y con mucho agite por parte de los espectadores que cantaron hasta quedar afónicos el hit ‘Magia veneno’ y posteriormente, ‘A veces vuelvo’. El teclado de Martín ‘Macabre’ González generaba sonidos distorsionados y el baterista Agustín Rocino midió su fuerza en la percusión luciéndose también como protagonista del show.

Sobre el final, Fernando agarró una copa de vino y brindó con todos: ‘¡Salud San Juan, feliz vida!’. Y se despidió arrodillado y haciendo reverencia a la memoria de Pappo, Cerati, el ‘Bocha’ Sokol y en especial a David Bowie, que se retiró del escenario con un ‘Hasta siempre David’. Un lujo para los fans.