Antes de arreglar con Aldosivi. el goleador veinticinqueño, Angel Vildozo, había pasado rápidamente por San Juan y había dejado claro que le hubiera gustado estar al menos en los planes de San Martín. No se le dieron las cosas y desde All Boys pasó a la Perla del Atlántico para ser una de las figuras del nuevo modelo del Tiburón en la B Nacional. Volver a San Juan, siendo la primera vez que lo hacía como jugador, tenía un gustito especial para Angel pero el hincha de Villa Borjas no pudo celebrar un tanto suyo como para que su papá y su familia lo disfrutaran desde las tribunas. Jugó un partido aparte contra la gente. Reclamó mucho con el asistente cuando San Martín empezó a ganar el partido. Se lo vio caliente, ofuscado. Después, se volvió a meter en el partido y protagonizó una lucha tremenda con Barone. Ganó y perdió pero una le tenía que quedar y fue en el segundo tiempo. Llegó el centro desde la izquierda, sobró a todos la pelota y le quedó para matarla de pecho. Vildozo se sorprendió por la soledad en la que se encontró cara a cara con Ardente y no la terminó de acomodar para poder definir. Por eso, su remate se elevó y dio en el travesaño cuando parecía el descuento de Aldosivi. Después, se tiró un poco más atrás para asistir a sus compañeros, pero su entrega no tuvo recompensa. Vildozo añoraba jugar en San Juan y su primera experiencia lo dejó con la cara larga por un gol que se le escapó por milímetros pero del que no se olvidará en mucho tiempo más.
