Actualmente la minería posee amplias reglamentaciones y normativas que establecen exigencias en materia de seguridad laboral, cuidado ambiental y políticas de trabajo. Antiguamente, en la mina Iwami Ginzan, las condiciones de trabajo eran inhumanas, ya que se empleaban esclavos para la extracción del mineral, sin ningún respeto por el cuidado del medio ambiente. Debido a la influencia histórica de la mina en relación al surgimiento del respeto por los derechos de los trabajadores, al cuidado medioambiental y a su base de desarrollo económico, fue declarada patrimonio de la humanidad.