La sirena comenzó a sonar. En pocos segundos, el camión rojo ingresó a toda velocidad al playón de la delegación de Bomberos, que está por calle San Luis. Los cuatro bomberos no tardaron en bajar, conectar mangueras y empezar a echar agua por todos lados. No había fuego. No estaban apagando un incendio. No se estaba quemando el lugar. Lo que estaban haciendo era un simulacro para mostrar a las autoridades de la Policía de la provincia cómo trabajan. Esto lo hicieron porque hoy Bomberos cumple 85 años desde su creación.
Es usual que el cuerpo de bomberos realice ejercicios para mantenerse en forma. Pero lo que hicieron ayer, después de la misa en la Catedral, fue una demostración de lo que saben hacer para que los superiores de la Fuerza lo vieran. Cerca del mediodía entró el camión rojo al destacamento, con la sirena a full. Primero hicieron un simulacro para mostrar cómo se apaga un incendio. Hubo mucha agua, que en esta oportunidad sirvió para regar las plantas que había en el lugar. Poco después, el camión volvió a entrar. Lo que hicieron en la segunda entrada fue un simulacro de rescate de un hombre, en un accidente de tránsito. Uno de los bomberos actuó como la víctima. El resto no tardó en desplegar camillas y todos los elementos de primeros auxilios que se usa en estos casos. Mientras se realizaba el simulacro, los bomberos aprovecharon la oportunidad para explicar a las autoridades para qué servían y cómo se usaban los elementos.
Esta fue una de las tantas actividades que organizaron para celebrar el aniversario de la institución. El fin de semana pasado hicieron una posta atlética hasta la Difunta Correa y hasta un torneo de fútbol. Ayer hicieron una misa en la Catedral y hoy será la cena de gala.

