La directora del Museo Mariano Gambier, Catalina Teresa Michieli, está entusiasmada con la futura mudanza de ese predio que contiene la célebre momia del cerro El Toro (bajada en una expedición encabezada por DIARIO DE CUYO en 1964) y otras 6 más. Es que calcula que en su nuevo domicilio contará con el doble de visitas tanto locales como de otras provincias. El fundamento: estará ubicado en una zona urbana, de fácil acceso y con varias líneas de colectivos que pasan por el lugar.
Condiciones que no tiene el edificio que ocupa actualmente en Ruta 40 entre Progreso y calle 5, Rawson. El Gobierno, la UNSJ y la Municipalidad de Pocito firmaron un convenio para que el museo se construya en tierras pocitanas. Medida con la que también esperan favorecer el turismo en este departamento.
Según Michieli, unas 50 personas, en promedio y por día, consultan por visitas al lugar, pero sólo aceptan la mitad de visitas por cuestiones de comodidad. ‘El museo está casi al lado del taller donde hacen la Revisión Técnica Obligatoria, y la mayoría de los días hay colas interminables de vehículos que dificultan el estacionamiento de los autos de gente particular o de las movilidades que transportan alumnos o turistas que vienen al museo -explicó Michieli-. Además, los colectivos más cercanos pasan por calle General Acha o por calle 5 y lateral Oeste de Ruta 40, bastante a trasmano y peligroso si se quiere llegar al museo caminando‘.
Michieli también contó que desde que se mudaron a este domicilio hace 6 años, pidieron a la Dirección Nacional de Vialidad que colocara un cartel indicando la proximidad del museo, cosa que nunca sucedió. Pero aseguró que todos estos inconvenientes quedarán superados cuando se construya el edificio propio.
El mismo se levantará en un terreno de 1.700 m2, ubicado en la calle Aberastain a metros de calle 12, que el municipio de Pocito le cedió a la provincia con la condición de que allí se construya la sede propia de este museo arqueológico que guarda los restos del pasado de la cultura sanjuanina.
El proyecto previo, que llevó a cabo la Dirección de Arquitectura de la provincia, incluye la construcción de un edificio de unos 1.300 metros cuadrados y de dos plantas de modo que haya suficiente lugar para exponer todos los elementos que contiene actualmente el museo. La planta baja estará dedicada a las tareas propias de la exhibición e investigación arqueológica, con espacio para todas las actividades, incluyendo la biblioteca. Mientras que en la planta alta se concentrará, principalmente, el área administrativa.
Michieli también comentó que la obra costará unos $4,5 millones. Y que, una vez concluida la misma, la UNSJ se hará cargo de la instalación, custodia, operación y funcionamiento del museo.