"No es una declaración ni un experimento. Sólo soy yo queriendo correr con mi bicicleta con lo que en el pasado fue un grupo de gente agradable con la que comparto intereses”, confesó Armstrong en una entrevista hace unos días.
“Estoy seguro de que habrá alguna reacción negativa. Habrá gente que crea que no es bienvenido y habrá otra que aún quiera verlo. Él espera un poco de todo, estoy seguro de que está preparado”, afirmó Juskiewicz. Y sí parece que lo está porque así lo hizo conocer el propio ex-ciclista: “Soy consciente de que mi presencia no es un asunto fácil y por eso animo a la gente a que si quiere chocarme la mano, bien. Si me quiere mostrar el dedo del medio, también está bien”, dijo el ex-campeón.