Decenas de autos de marcas clásicas como Ford, Torino o Chevrolet, motos y hasta los primeros colectivos que circularon en el país deslumbraron ayer a las miles de personas que colmaron el Paseo del Bicentenario. Las ocho cuadras de la Avenida 9 de julio, entre Belgrano y Corrientes (en el porteño Paseo del Bicentenario), fueron escenario propicio para que automóviles de todas las épocas, que acompañaron el desarrollo de la sociedad argentina, desfilaran e hicieran emocionar no sólo a los fanáticos de los fierros, sino también a todo el público.

Los Torino, que se fabricaron en el país entre 1966 y 1980, fueron los más aplaudidos. Pero no le fueron en zaga las Chevy Coupé o los Ford Falcon, en sus distintos modelos, que concitaron la atención de muchas personas ante el extremo celo de sus dueños. Néstor Cabrera tiene un Torino desde hace 19 años. "Lo cuido y lo quiero como a un chico, por eso no los saco mucho a la calle. Muchas personas me preguntan qué se siente al manejarlo y les contesto que es una experiencia inigualable", relató.

También desfilaron los Fiat y entre ellos el clásico modelo 600 o Fitito de fines de los 70 y principios de los 80, que se mostró junto a los modelos 128 y 1500, todos restaurados por sus actuales dueños, con su interior y tablero originales.

Los Ford de la década del "40 y "50, junto a los Renault Gordini, los Peugeot 404 y las famosas Estancieras, muy utilizadas en los años "60 y "70, circularon en fila india ante los aplauso de una multitud que hacía flamear las banderas argentinas.

Junto a los automóviles pasaron decenas de motos de todas las épocas, desde las clásicas Siambretta de fines del 50 y principios de los 60 hasta las populares Zanella, junto a las Ducato italianas.

Los colectivos, uno de los más relevantes inventos argentinos del siglo pasado, también se hicieron presentes en la Avenida 9 de Julio. Allí desfilaron los primeros transportes públicos de sólo dos puertas, una a la izquierda del chofer, donde los más chicos pudieron subirse durante algunos minutos. La Fuerza Aérea Argentina también se sumó a los festejos y aviones caza sobrevolaron a baja altura, mientras desde los escenarios la gente disfrutaba de espectáculos folclóricos y de música latinoamericana.