Los hinchas de San Lorenzo estuvieron lejos de tolerar el quedar afuera de la pelea por el Apertura y descargaron su furia contra los jugadores. El principal apuntado fue Alejandro Gómez, más aún cuando vio la roja cerca del final por insultar al árbitro Collado. Los hechos más complicados se produjeron cuando el Papu se retiraba del Gasómetro y un grupo de hinchas lo insultó e incluso lo escupió en el estacionamiento. Entonces, debió mediar la policía para que la situación no se desbordara todavía más. Respecto de los insultos para sus dirigidos cuando se retiraban de la cancha, el técnico Diego Simeone consideró que “la gente viene y paga la entrada, y por eso piensa que está en el derecho de insultar o agredir. Pienso que nada justifica algo así, pero en cierta medida hay que entender tanta bronca”. Igualmente, el Cholo admitió el bajo rendimiento del Ciclón: “Cuando jugás mal como nos pasó a nosotros, tenés muchas más chances de perder que ganar”.
