Los campings de Rivadavia y de El Pinar reabrieron tras los arreglos en sus piletas y volvieron a coparse por familias, que dicen que ahora están bien cuidados, que sus entradas son baratas y que tienen cada vez más seguridad, por lo que no hubo dudas a la hora de elegirlos.

El camping de Rivadavia estuvo cerrado hasta el miércoles pasado, ya que arreglaron una bomba de la pileta, mientras que el balneario de El Pinar fue habilitado el fin de semana pasado y ayer largó su segunda semana. "Nosotros veníamos siempre, incluso cuando la pileta era un descontrol y la gente hasta se bañaba con zapatillas. Pero ahora no podemos creer lo lindo que está, lo limpio, lo cuidado. Hay mucha seguridad y varios guardavidas, cosas que valorás mucho cuando venís en familia", dijo Silvia Marín, mientras tomaba mate junto a los suyos al costado de la pileta en El Pinar. La entrada al balneario, cuya pileta tiene agua de río, cuesta 20 pesos.

En el camping de Rivadavia y por quinto verano consecutivo, cinco familias volvieron a copar un sector de las carpas. Son de Marquesado y para nada improvisados. Además de llevar una cocina de campaña y un freezer, este año no dudaron en fumigar el sector para evitar mosquitos y vinchucas. Son unas 25 personas, que pasarán una semana en el camping tratando de que nadie extrañe nade de casa. "Nos trajimos todo lo que se nos fue ocurriendo, si hasta el pan y las semitas las horneamos acá. Y de las cinco veces que vinimos al camping, este fue el año que mejor lo encontramos", apuntó Rolando Olivera, vocero de todas las familias.

Muy cerca de la verdadera ciudadela que forman todas las carpas de estos vecinos de Marquesado están los Argumero. Y lo particular de ellos que es son marplatenses y optaron por venir a San Juan, en plena temporada de la costa. "La montaña tiene lo suyo y este camping nos encantó. La pileta está al lado de un cerro, algo que nos llamó mucho la atención", contó Laura, quien en Mardel vive a 17 cuadras de la playa.

Estas opciones se suman a los esteros de Zonda, otro lugar de Rivadavia elegido por los gasoleros que buscan escaparle al calor sanjuanino.