En su búsqueda constante de atraer visitantes, San Juan ahora trabaja para convertirse en uno de los destinos del Programa Federal de Turismo Social que tiene la Nación. Con esto, pretenden recibir contingentes de visitantes que se benefician con subsidios nacionales para vacacionar, mayoritariamente integrados por jubilados. Las autoridades de la Cámara Hotelera y Gastronómica de la provincia se mostraron expectantes ante la iniciativa, pero adelantaron que como máximo pueden ofrecer unas 1.000 plazas, especialmente porque no todos los hoteles tienen accesibilidad para discapacitados, uno de los requisitos del plan nacional.

‘El Programa Federal de Turismo Social se reactivó después de un tiempo y es el momento ideal para acoplar a San Juan como destino. El plan subsidia a los jubilados con el 60% del costo de sus vacaciones y a los activos con el 40%; el resto debe pagarse al contado antes de viajar. Los hoteleros, a su vez, reciben el desembolso del Ministerio de Turismo de la Nación a los 60 días aproximadamente’, dijo Raúl Romarión, director de Turismo Social de la provincia. Las estadías del plan contemplan 5 noches de alojamiento, con media pensión y excursiones. Actualmente, un viaje oscila entre los $1.700 y los $2.000 por persona.

Si bien en San Juan aún no saben cómo repercutirá la medida en hoteles y prestadores, en Chapadmalal (Mar del Plata) y Embalse (Córdoba) el turismo social es un puntal en sus economías. Por ejemplo, desde la Unidad Turística Chapadmalal (integrada por 7 hoteles) le informaron a este diario que entre octubre y abril reciben un promedio de 20.000 beneficiarios por mes, mientras que desde la UT Embalse (conformado por 6 hoteles) llegan a recibir en temporada alta a unas 8.000 personas y a 3.200 en la baja.

Los requisitos para que los hoteles adhieran al programa son mínimos, como la accesibilidad para discapacitados (la mayor cantidad de turistas son de edad avanzada) y orden en sus cumplimientos fiscales. ‘Hay expectativa por saber cómo pretenden implementar esto, los costos, los requisitos, las fechas de viaje. Estamos predispuestos a estudiar la medida, pero a priori lo vemos como algo positivo porque lo mejor en los hoteles es tener las camas ocupadas la mayor cantidad de tiempo’, indicó Luis Tallana, presidente de la entidad. Sin embargo, reconoció que no todos los hoteles cumplen con los requisitos. ‘De 30 hoteles en el Gran San Juan asociados a la Cámara, el 50% no tiene infraestructura de accesibilidad, por ejemplo. Por eso, para recibir turismo social estimamos que sólo una parte de esos complejos puede mostrarse interesada, lo que puede representar como máximo unas 1.000 plazas’, agregó.

En 2008, San Juan fue parte del Programa Federal de Turismo Social, pero entonces sólo un hotel se adhirió y la iniciativa no tuvo vigencia.

Esta vez, tienen más esperanzas, a la vez que Romarión adelantó que San Juan armará un paquete turístico para ofrecer estadías combinadas en hoteles del Gran San Juan y en el de Pismanta, para usufructuar los beneficios de las agua termales y utilizarlos como gancho para los máximos beneficiarios del programa, los jubilados.