San Juan, 27 de diciembre.- La situación se repite con cada lluvia, sin importar la intensidad que tenga. Uno de los pasajes ubicados en el interior del Barrio Solares 5, de Capital, se inunda con las precipitaciones y al no tener desniveles ni desagües, el agua permanece estancada sobre las calles durante semanas, con todos los inconvenientes que eso conlleva: olores nauseabundos, proliferación de insectos y sapos, contaminación y complicaciones para mover los vehículos.


Vecinos del lugar dijeron estar hartos de reclamar sin ser oídos. "Lidiamos con este problema desde hace 14 años, nadie nos ofrece una solución. En este pasaje viven doce niños, es imposible vivir aquí", señaló una de las vecinas indignadas en diálogo con DIARIO DE CUYO ONLINE.


El barrio está ubicado detrás de la fábrica Empaque, entre calles Tahona, Sarassa y lateral sur de Circunvalación.