El enólogo anunció: ‘Vamos a entrar a la nave‘ y las 19 chicas se encontraron rodeadas de máquinas cargadas con uva, que iban realizando todo el proceso hasta terminar en la caída de las gotas violáceas. Ellas, envueltas en el aroma de los granos recién abiertos, miraban de arriba abajo y escuchaban con atención. Así, las candidatas a Reina del Sol conocieron los secretos de la elaboración del vino, en la bodega Casa Montes, en Caucete, como parte de su capacitación en el marco de la fiesta 2012, cuya temática es ‘Vino Argentino, Bebida Nacional‘.

Las chicas hablaban fuerte para hacer preguntas mientras el proceso de elaboración seguía sin freno. Pedro Pelegrina les explicaba el camino que tienen que recorrer los granos de distintas variedades hasta llegar a las botellas.

Tras observar el interior de las tolvas y las piletas, las chicas se sacaron fotos. Posaron entre los tanques de acero inoxidable en los que se fermentan los líquidos tintos y blancos y entre las barricas de roble acomodadas en forma de pirámide. Pero lo que más les sorprendió fue la sala de envasado. "Es re grande, no conocía estas máquinas", decía la angaquera. Mientras que la chica de Sarmiento agregaba: "Yo nunca había visto una bodega así".

Allí, después de conocer la maquinaria y las cintas por las que pasan las botellas, se dispusieron a hacer preguntas. Qué tipo de varietales se elabora, cuáles se envía al mercado interno y cuáles se exporta, cuál es la capacidad de producción y la temperatura a la que debe ser expuesto el vino durante su fermentación fueron algunos de los interrogantes. Así, todas demostraron que conocen la actividad productiva de sus propios departamentos y que las charlas y los videos que han visto sobre la producción vitivinícola de la provincia dieron frutos.

A la hora de la degustación, tuvieron la opción de elegir la variedad a probar. El Syrah Rosé, el tinto Cabernet Sauvignon y el blanco Viognier fueron las variedades seleccionadas. Poniendo en práctica los cursos de cata, las chicas movieron sus copas en forma circular, olieron el vino y recién después inclinaron las copas. Con un brindis, coronaron el recorrido para volver al hotel en el que almorzarían antes de pasar por el spa.