En abril del 2012 se produjo una ola de colapsos de pozos negros en diferentes barrios de Rawson que provocaron que cientos de vecinos debieran convivir con las aguas servidas, incluso dentro de sus casas. Frente a esta situación, el municipio decidió colaborar con el desagote y la construcción de nuevas perforaciones, pese a ser un trabajo que le corresponde al dueño de cada vivienda. Hasta el momento gastó en estas obras casi medio millón de pesos.

Rubén García, de Obras y Servicios de Rawson, dijo que hace un año el municipio destinó 2 camiones atmosféricos para desagotar los pozos sin costo alguno para los vecinos. Fue tanta la demanda, que tuvieron que contratar además un camión privado (cobra $250 por desagote) y hacer un cronograma de trabajo. Desde hace un año se desagotan 13 pozos diarios en promedio, 4 en forma privada, lo que generó un gasto de $240.000 hasta el momento.

‘El problema más serio se da en los barrios de monoblocks donde hay un pozo de 7 metros de profundidad para 24 familias, cuando una familia tipo necesita uno de 10 metros para que no colapse a los 5 años’ dijo García.

Martín Juncosa, interventor del IPV, dijo que ‘la capacidad de los pozos está perfecta porque antes de hacerlos se hace un estudio de suelo para determinar su permeabilidad’. Agregó que ‘el problema es que los vecinos no se encargan de mantenerlos’.

El municipio además construyó 7 pozos nuevos en los barrios afectados, también con mano de obra municipal y privada. Se invirtió $41.450. A esto se suma los $50.000 que gastó en la aplicación de un tratamiento de sales en los pozos colapsados para mejorar su permeabilidad y evitar desbordes.

García dijo que el problema de los pozos colapsados quedará solucionado cuando estén las cloacas en unos 3 años. Mientras tanto, el municipio seguirá colaborando. Agregó que hay 243 pozos para desagotar en lista de espera, y 8 más por hacer.