Género rentable si los hay, los “disaster films” (películas de catástrofes) tuvieron su esplendor en los ´70 con tragedias focalizadas en aeropuertos, edificios y ciudades. En 1990, resurgió con el desarrollo tecnológico y la inclusión de extraterrestres y zombies de avanzada. A fin de esa década, la incertidumbre del fin del milenio amplió el campo de devastación a niveles planetarios; y a los ataques del espacio exterior -como en Señales, Día de la Independencia y La Guerra de los Mundos-, sumó fabulosos desastres naturales. En este rubro entra 2012, pero no es la única. * Impacto Profundo: 1998. De M. Leder. Con Robert Duvall, Téa Leoni y Morgan Freeman. La trama describe los intentos para destruir un cometa que chocará con la Tierra causando una extinción en masa.
* Armageddon: 1998. De M. Bay. Con Bruce Willis y Liv Tyler. Un asteroide se dirige a la Tierra y un grupo de expertos debe evitar el Armageddon (o fin de los tiempos).
* El día después de mañana: 2004. De R. Emmerich. Con Dennis Quaid. Una catástrofe climática se desencadena a causa del calentamiento global.
