El charqui ha acompañado desde siempre a los pueblos originarios, pues salar la carne como método de conservación es una costumbre ancestral. Inclusive se ha convertido, con algunas adaptaciones y giros modernos, en un plato gourmet requerido por la gastronomía actual. De allí es que surge la idea de maridarlo en este evento a este típico plato de la zona cuyana y del Norte argentino con Malbec. La idea es elaborar charquicán a base de carne salada y secada artesanalmente a la antigua usanza, que luego será parte de un guisado cuyo fondo de cocción estará aromatizado con vino de ese varietal.

Esta preparación criolla lleva además cebolla, papas y condimentos.