En el Senado resulta difícil prever el resultado final de la sesión de hoy por la persistencia de una estrecha y persistente paridad de fuerzas. Un recuento minucioso de los definiciones públicas de los legisladores arroja una leve ventaja de los que rechazan la iniciativa sancionada por Diputados, por un margen de apenas dos senadores (30 a 28). La clave del trámite final la tienen 12 parlamentarios que eludieron definiciones claras, de los cuales 7 son oficialistas y 5 opositores. Quienes creen tener el poder de interpretar los silencios a medias de los legisladores que ocultan sus posiciones, se animan a sostener que la mayoría de los primeros terminarán por apoyar el proyecto, mientras que algunos de los que se oponen no aparecerán el miércoles de la discusión. El jefe del bloque del Frente para la Victoria, Miguel Angel Pichetto, confirmó que “mañana se debatirán los dictámenes de mayoría y de minoría” y aclaró que “si gana el rechazo al proyecto, el tema está terminado”. “Esas son las reglas parlamentarias. Eso es lo que dice el artículo 81 de la Constitución. Un tema no puede volver a ser debatido durante ese año en el Congreso si fue rechazado por una de las Cámaras”, enfatizó.
