Un clima optimista se advierte en el entorno de Mauricio Macri, pero con el objetivo de no perder de vista que todavía Cambiemos no ganó el balotaje presidencial del próximo 22 de noviembre. A raíz de esta situación surge el entusiasmo que no pueden ocultar en el radicalismo, empezando por su jefe, Ernesto Sanz, hacedor del acuerdo con el PRO que podría posibilitar el regreso de la UCR al poder, de la mano de Macri. Muchos radicales, según la agencia de noticias DyN, ya se autopostulan para algunos de los tantos cargos que Cambiemos deberá cubrir si gana la segunda vuelta.
‘Descuelguen los trajes. A caminar la provincia y los barrios‘, ordenó Mauricio Macri a colaboradores, en el marco del clima optimista. ‘Yo los conozco a todos, así que nadie mejor que yo para decirles qué lugar van a ocupar cuando gobernemos la Nación, la provincia de Buenos Aires y la Ciudad‘, les bajó línea Macri, desactivando las especulaciones acerca del destino que tendrán muchos dirigentes del PRO que hoy ocupan lugares en el gobierno porteño, en la Legislatura o en el Congreso Nacional.
