Sobre una pasarela rodeada de decenas de espectadores, ayer se hizo el concurso Miss y Mister Verano 2012, en el complejo Del Bono Beach. Y los ganadores fueron Florencia González y Maximiliano Riveros, en un certamen codiciado por los modelos porque además de los premios como ropa, un viaje y membresías en el parador, harán un book fotográfico con Mariano Michkin (quien trabaja en las agencias de modelos más importantes del país) y con otro fotógrafo local.
En el concurso, los candidatos (algunos de los cuales surgieron de un casting) desfilaron distintos tipos de ropa, antes de someterse a la decisión del jurado que consagró a los ganadores por votación unánime.
Ella: Una revancha para la bella Florencia
"Mi familia me decía que la tercera iba a ser la vencida y que el número 12 me iba a dar suerte en el 2012. Y tuvieron razón", decía Florencia González, la flamante Miss Verano 2012 y candidata número 12. La modelo y estudiante de Educación Física ganó el concurso por votación unánime y dejó atrás dos certámenes sin festejo, ya que antes fue candidata a Reina de la Minería 2010 y aspirante a la corona como representante de Rivadavia en la Fiesta del Sol 2012. Florencia tiene 20 años, mide 1,70 metro y sus 95-60-90 conquistaron al jurado. "No puedo creer que soy la ganadora", repetía la chica, entre los abrazos de su familia, amigo y novio. Hija de un militar sanjuanino, Florencia nació en Buenos Aires. Pero hace 5 años que los González se radicaron en la provincia, tras un pase de destino de su padre. "Siempre quise ser modelo, desde que tengo memoria. Ahora vamos a ver cómo sigue mi carrera, espero que se abran algunas puertas", contó la nueva diosa del verano.
Él: El luchador que se convirtió en modelo
Maximiliano Riveros (21) es luchador de MMA, un arte marcial mixto que se también se denomina Vale Todo. Entre combates de puño y patadas estaba cuando un amigo lo convenció de que podía ser modelo. Así fue como desde hace menos de un año se sumó a la agencia de Soledad Tassi y desde ahí lo convocaron para ser candidato a Mister Verano. "Al principio me daba vergüenza el tema de las pasarelas, pero de a poco me fue gustando y a medida que conocés gente querés seguir creciendo en la profesión", dijo Maximiliano, quien pese a su trabajo no se cuida en las peleas. "Te exponés a lesiones y ya tuve algunas importantes, pero es lo que me gusta", señaló.
"Nunca antes había estado en un concurso o algo parecido a esto, pero la verdad que ganar es una alegría especial", agregó el chico que estudia Ingeniería Mecánica y vive con su hermana. "Mi mamá trabaja en el Sur y nosotros nos quedamos en San Juan para seguir con los estudios. ¿Si cocino y esas cosas? Cuando me toca sí, sin problemas", contó Maximiliano, de 1,78 metros y vecino de Capital.
