El freno a Pascua Lama significó la reducción progresiva de personal
a lo largo de 2013 y a mediados de diciembre, la empresa
informó la mantención de 3.500 personas vinculadas al lado argentino del proyecto (Lama, en San Juan), para obras que incluyen movimiento
e impermeabilización de suelos, obras de manejo de agua, mantenimiento de infraestructura general y monitoreos ambientales, entre otras tareas. La decisión
significó el despido de otros 1.500 operarios. Actualmente y según fuera difundido
por medios especializados, Barrick reestructura su organigrama en Latinoamérica
con la eliminación de la gerencia regional ubicada en Santiago de Chile. Esto significa que de ahora en más, los ejecutivos latinoamericanos deberán
comenzar a reportar a la casa matriz en Toronto, Canadá.