Sin conexión. El caño de agua que provee a la planta potabilizadora de San Agustín se vio afectado por la creciente del río. La cañería cruzaba el cauce. 

La tormenta que afectó a Valle Fértil durante la madrugada de ayer hizo que el río San Agustín creciera notablemente y esto trajo problemas a la gente. Es que la creciente rompió algunos tramos del conducto que provee agua potable a la planta potabilizadora de San Agustín, y por eso la villa cabecera y Baldes del Norte tuvieron menos presión o se quedaron sin el servicio. Lo mismo pasó en otra zona del río y por eso habitantes de Colonia Los Valencianos también se vieron afectados. Esta situación llevó a que muchos vecinos de estas zonas se quejaran y dijeran que este problema sucede cada vez que el río trae agua de más. Desde la oficina departamental de OSSE admitieron este problema y comentaron que ayer estaban trabajando para volver el servicio a la normalidad. 

Ayer en la mañana, desde OSSE dijeron que las roturas de produjeron en la zona de El Collado, que es donde están los caños que llevan el agua para San Agustín y en el cruce Los Valencianos, que provee a otra zona menos poblada.

Se trata de dos conductos que son de 250 mm de diámetro y de 75 mm de diámetro, respectivamente, y que pasan de manera paralela al cauce del río o que lo atraviesan. "El río trajo abundante agua y estaba muy negra, porque bajó desde las sierras con las cenizas que quedaron por los incendios forestales. Estamos trabajando para solucionar la rotura de los caños y por eso hay zonas que tienen baja presión y otras que están sin el servicio. Sobre todo, en la zona Este de San Agustín", dijo Daniel Perea, referente de OSSE en Valle Fértil y contó que estaban trabajando con personal del departamento, para hacer las juntas de los caños que se habían visto afectados. Sin embargo, no dio más detalles de cómo se haría el arreglo, la extensión de los caños que debían reparar, ni cuánto tiempo estimaban demorar. 

Ante esta situación, vecinos de las zonas más afectadas dijeron que este problema no es nuevo. Algunos comentaron que hace al menos 12 años sucede esta misma situación cada vez que crece el río. "Es que los caños son como mangueras que se rompen fácilmente cuando el río aumenta. Hace mucho que venimos pidiendo una solución a esto. En este momento -por ayer en la siesta- estamos aislados y sin agua. Sabemos que seguramente vamos a estar días así", dijo Marina Fernández, de Los Valencianos, mientras que Perea comentó que en esta zona el arreglo se hará después del resto "porque sólo hay unas 10 casas afectadas y algunas tienen pozos propios". 

En San Agustín el enojo era mayor. Es que si bien algunos vecinos dijeron que ellos no notaron que el servicio se viera reducido, hubo otros que contaron que casi no tenían agua potable. Incluso, hubo prestadores de servicios turísticos que dijeron que estaban muy molestos, porque "todos los veranos" les sucede esto mismo ante cada crecida y muchos visitantes no quieren volver por esa razón.

"Esto es un problema que afecta a los vecinos y a los que trabajamos del turismo. Que el río crezca es hermoso porque el turista tiene actividades para hacer, pero no podemos disfrutar del departamento si no tenemos agua potable", dijo Ester Videla, una vecina, mientras que Gladys Elizondo, que vive a 3 cuadras de la plaza de San Agustín, dijo que "cortaron el agua, y antes de eso salía turbia".

"Tenemos las conexiones de agua cerca del río y con cualquier creciente se dañan. Esta vez no fue una creciente grande, e igual se llevó la manguera que alimenta a San Agustín. Si bien es gruesa, la presión se la llevó", dijo Olga Elizondo, otra vecina, y comentó, al igual que la gente de Los Valencianos, que los vecinos hace muchos años piden obras mejores para evitar estos problemas. Consultado por este reclamo, Perea tampoco dio detalles. "Desde hace un año más o menos no nos pasaba, porque no había creciente", dijo y cortó la comunicación con este medio.

Otro inconveniente

Los vecinos dijeron que también hay zonas de San Agustín que están sin agua porque se dañó un caño de calle Alem. Dicen que el pavimento se hundió ayer por la lluvia, en una zona donde trabajaron para las cloacas, y eso afectó la cañería de agua.