Que Sarmiento reciba una mención 200 años después de su nacimiento genera sorpresa. Sin embargo, desde que comenzó a entregarse la distinción de Vecino Ilustre en Capital, en 1993, el premio se ha destacado en la amplitud en los criterios para determinar quiénes lo merecen. Es que la ordenanza que contempla la distinción, plantea que puede entregarse a personas vivas o fallecidas. Además, permite premiar desde deportistas hasta políticos, pasando por artistas y profesionales de distintas disciplinas. En el año 2008, por ejemplo, la lista de los 12 homenajeados generó sorpresa porque en ella figuraba un niño de sólo 12 años: Claudio Venerdini se ganó la mención por su decisión de ofrecerse como donante en vida de un órgano, aún cuando la ablación no se concretó. Por su parte, en 2009, todos los distinguidos fueron profesionales. Mientras que, en otras oportunidades, como por ejemplo en el año 2006, la lista fue tan variada que integraba desde personas que se dedican a ayudar a los más necesitados hasta referentes que luchan por el cuidado de la ecología y funcionarios de distintos rangos y sectores del Gobierno.
