San Juan, 10 de febrero.- La segunda jornada del séptimo cruce estuvo marcado por las inclemencias del tiempo, a diferencia de las expediciones anteriores, según aquellos participantes con experiencias previas, como el intendente Macelo Lima y el propio gobernador José Luis Gioja.

La novedad fue que en la subida a El Espinacito ( a 4820 metros de altura) el grupo tuvo que soportar un fuerte viento blanco. Una nevada que nunca había ocurrido durante un cruce. Mientras que la llegada al refugio Sardina fue bajo una persistente lluvia.

El dato a destacar, es que el médico Sebastián Carbajal tuvo que atender a 95 de las 105 personas que integran el grupo afectadas por la altura. Solo hubo un jinete herido, un soldado del Ejército que llevaba las mulas cargueras, fue volteado por su animal sufriendo un fuerte golpe en el hombro que podría ser una fractura. Por precaución el soldado fue llevado de regreso a Barreal.

La embajadora británica, Shan Morgan, soportó con éxito las inclemencias del tiempo y continúa destacándose por su sencillez y su integración con el grupo. Se mueve sola, habla con todo el mundo y no deja de maravillarse con los paisajes de la cordillera y la historia de José de San Martín.

En este momento, la noche está despejada, hace menos frio que ayer, cuando la temperatura fue bajo cera y se vive una gran camaradería en el refugio Sardina. Integrantes de Gendarmería preparan la cena para el grupo y algunos todavía se recuperan del apunamiento.

Mañana será la jornada de descanso en este refugio y retomaremos la ruta el sábado hacia el límite con Chile, en el Valle de Los Patos.