Fue el primero y, a no dudar, el más esperado. Ver los colores Verdinegros frente a San Lorenzo, en inferiores, dio placer. Más aún cuando terminó el partido. Porque el tablero sentenció un 3-1 en favor de San Martín que resultó completamente merecido. El partido tuvo un goleador (Franco Palma) que será histórico. Un jugador distinto (Martín Galletti), que se comió la cancha. Y un rendimiento general del equipo local admirable. Cuatro de los Verdinegros ya habían debutado inclusive en primera división (Más, Aguilar, Luis Gómez y el propio Galletti). Del resto, los dos centrales (Aballay y Mercado) por ejemplo, tuvieron una tarea impecable. Y, como postre, la perlita a modo de vaselina de Ochoa en el tercer gol. Chicos grandes para un debut con sinfonía de fútbol.