Bañado en pintura plateada y con vestimenta medieval, “El Magín Alado” -personaje en que se convierte José Alfredo Ruiz Huidobro- es la estatua humana que llegó por primera vez a la feria, desde Buenos Aires. En silencio y prácticamente congelado; desde su pedestal, este caballero bendice con su espada y les entrega un pensamiento en papel a niños y adultos fascinados con sus movimientos, activados con el sonido de las monedas.
