Las quejas de los vecinos no son nuevas. Desde el 2006, cuando se erradicó la villa Hidráulica, en Capital, en el terreno comenzaron a arrojar escombros. Pero ahora, según los vecinos de las zonas aledañas, se tira todo tipo de basura, por lo que empezaron a aparecer ratas, alacranes y vinchucas. Además, dijeron que el lugar se transformó en un aguantadero de delincuentes.
Los restos de un perro muerto, las frutas y verduras podridas y las aceitunas en descomposición generan un olor insoportable. La gente que atraviesa el lugar tiene que taparse la nariz. Aunque cada vez son menos los que se animan a cruzar este baldío por el peligro que implica. ’Desde que tiran restos de comidas y animales muertos hay muchas ratas, vinchucas y alacranes. Todos los meses tengo que hacer desinfectar mi casa porque se meten estos bichos’, dijo Eugenia Meschini, que vive en el barrio Patricias Sanjuaninas que se encuentra frente al basural.
Jorge Castro, otro de los vecinos, dijo que hasta hace un tiempo la basura era arrojada en el lugar durante la madrugada, pero que ahora lo hacen a cualquier hora del día. ’El municipio de Capital limpia el predio cada tanto, pero la limpieza dura menos de una semana. Y se junta tanta basura que detrás de ellas se esconde los ladrones para asaltar a la gente que pasa por ahí’, dijo Castro.
Desde el municipio dijeron que ellos limpian el terreno, pero éste pertenece a la Escuela de Enología, y que se les ha pedido a las autoridades que cierren el lugar, pero que no han recibido una respuesta todavía. Este medio intentó comunicarse con las autoridades de la escuela, sin éxito.

